Juliana Di Tullio repasó la nueva legislación civil y comercial y destacó que, en lugar de “codificar desde la moral, acepta todos los tipos de posibilidades de familias y tiene una coherencia ética”.
La presidenta del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados, Juliana Di Tullio, aseguró que el nuevo Código Civil y Comercial es una mejora significativa “en lo que refiere a la concepción del Estado y los derechos de las personas”, y “cristaliza” los avances en materia de legislación vigente.
“Cambiamos un Código Civil que tenía 150 años, que fue votado a libro cerrado en menos de un mes en ambas Cámaras, que era muy elitista, y estaba pensado y diagramado para las dos mil familias más poderosas de la Argentina y, principalmente, con un Estado ausente”, destacó Di Tullio en diálogo con radio Rock & Pop.
“Este nuevo Código es para los 40 millones de Argentinos y con un Estado presente”, contrastó la diputada.
La nueva legislación presenta importantes modificaciones en temas como el matrimonio Igualitario, divorcio, uniones por convivencia, sociedades comerciales. “Lo que hace es no poner una visión moral del Estado sobre la forma de vida de los argentinos y cristaliza muchos derechos con los que se ha avanzado en 30 años de democracia”, dijo Di Tullio y puntualizó: “recordemos que en ese momento discutíamos si era posible divorciarse o no”.
Esta nueva normativa, “no codifica, como si lo hacía el Código de Vélez Sarsfield, desde la moral; acepta todos los tipos de posibilidades de familias que existen en el país y tiene una coherencia ética”, señaló la jefa de los diputados kirchneristas. Y agregó: “Este Código es absolutamente claro, y baja la litigiosidad en todo sentido”.
En relación a la adopción, se incorpora el derecho de los niños a ser oído y a que su opinión sea tenida en cuenta según su edad y grado de madurez. También tendrán derecho a conocer sus orígenes y a la preservación de los vínculos fraternos. “Con esta nueva codificación, se va a resolver de manera contundente el tema de adopción y el drama que existía por los trámites burocráticos”, sostuvo Di Tullio.
En términos de privilegiar y defender al consumidor, con este nuevo Código se incorporan pautas de interpretación, tanto de las normas como de las disposiciones contractuales, así como el deber de trato digno y no discriminatorio y, principalmente, contra las prácticas “abusivas de quienes ostentan una posición dominante en el mercado”.
“El Código Civil no es perfecto, hay que seguir mejorándolo, pero si es muy bueno en lo que significa la concepción del Estado y los derechos de las personas”, concluyó Di Tullio.
