En la reanudación de la negociación con los fondos buitre, el Gobierno argentino no hizo efectiva su propuesta, pero adelantó al mediador Daniel Pollack que la oferta de pago incluirá una quita importante de intereses punitorios.

Asimismo se aclaró que la oferta estará sujeta a la aprobación del Congreso nacional.

Al frente de la delegación argentina estuvo el secretario de Finanzas, Luis Caputo. Según pudo saberse, hubo una reunión con el mediador Pollack, y luego con representantes de los tenedores de bonos en litigio.

Por su parte, el Gobierno hizo conocer un comunicado difundido por el Ministerio de Hacienda y Finanzas, que conduce Alfonso de Prat-Gay, donde se anticipa que “Argentina presentará esta semana, por primera vez, una propuesta formal al mediador”.

“El Gobierno quiere lograr una quita a los intereses punitorios que pesan sobre la deuda con los bonistas”, señaló el ministerio, que precisó que “la República Argentina inicia esta semana los encuentros formales con el mediador y con los representantes de los holdouts. Estas conversaciones, originalmente previstas para la semana pasada, habían sido postergadas a pedido de los propios litigantes”.

“La propuesta del gobierno argentino, aún en elaboración y en términos muy distintos a los trascendidos periodísticos del día de la fecha, se presentará ad referéndum de la aprobación del Congreso de la Nación”.

Esa aclaración hecha por el Gobierno argentino tiene que ver con la necesidad de evitar denuncias contra los que desarrollan la negociación por infringir las leyes argentinas. Por eso, se aclara que antes de firmar un acuerdo definitivo, el Congreso argentino deberá derogar la conocida como “ley cerrojo”, que impide hacer cambios en las propuestas a bonistas que no entraron a los canjes de 2005 y 2010.