– ¿Cómo ve el pre-acuerdo al que llegó el Gobierno con los holdouts, y que deberá tratar el Congreso?

– Aún no tenemos conocimiento de las leyes, ni del volumen del endeudamiento, ni de las comisiones. Lo que han dicho de momento es muy pobre y desalentador. Han dicho que el endeudamiento es de 12 mil millones de dólares en títulos para pagarle a algo que no llega al 4% de los acreedores del default de 2001. Para pagarles a todos los demás, el 93%, se emitió deuda aproximadamente por 30 mil millones, o sea que es un “problemón” hablar de que el acuerdo significa pagarle al 4% la mitad que al 93%.

Por otra parte, la derogación de la Ley Cerrojo y la de Pago Soberano tienen un riesgo legal importante, porque hay un 93% que en buena fe y en base a la existencia de esas leyes admitió un canje. Pero lo que a mi me preocupa, es tomar 12 mil millones de dólares para dárselos a Paul Singer, que es el enemigo público número uno de todos los países del mundo.

– Luego de las arduas negociaciones que usted encaró como ministro de Economía, ¿era una prioridad resolver este tema a tan pocos meses del recambio de Gobierno?

– La política económica del Gobierno reposa toda sobre el endeudamiento, y además tampoco lo consiguen. Hace poco conocimos los documentos del Fondo Monetario Internacional con lo que le recomendaban a la Argentina y el libreto es ese: “tarifazo”, devaluación, recorte del gasto, subir las tasas, encarecer el crédito. Todo eso ya lo han hecho, lo que les falta es el endeudamiento. Como ya conocemos los resultados, es difícil que las mismas políticas den resultados distintos. El presidente Macri debería habernos explicado algo en la Asamblea Legislativa, pero lo que hizo fue tirarle la culpa al anterior Gobierno.

– ¿Cómo sigue el tema si se aprueba el acuerdo?

– Después no vamos a poder discutir más nada. Una vez que se hayan endeudado, vamos a estar todos los días con el vencimiento de los intereses y el Fondo Monetario soplándonos la nuca. Nuestras oficinas del quinto piso del Ministerio de Economía se van a trasladar a Washington. A nosotros nos toca ser oposición responsable y facilitarle las cosas al Gobierno, siempre y cuando lo que plantee sean los intereses de las mayorías, los que nos votaron a nosotros y a ellos, y que no nos estafen más. Esperamos que Macri rectifique el rumbo.