Aunque hubo voces en contra, la mayoría de los expertos que expusieron ante el plenario de comisiones de la Cámara de Diputados se manifestó a favor del arreglo con los holdouts. El debate continúa este martes, cuando se firmarán los dictámenes.
El acuerdo que el Gobierno pretende lograr con los fondos buitre cosechó este lunes un respaldo general de especialistas, que desfilaron uno a uno ante un plenario de comisiones de la Cámara de Diputados que continuará este martes con la firma de los dictámenes.
Los expertos expusieron a lo largo de ocho horas ante las comisiones de Finanzas y Presupuesto y Hacienda -presididas por Eduardo Amadeo y Luciano Laspina, respectivamente- sobre el arreglo que pretende poner punto final a un litigio que ya lleva 15 años.
El acuerdo, por el cual el Gobierno busca tomar deuda por 15.000 millones de pesos para pagarle a los buitres, recibió el apoyo de la mayoría de los especialistas en virtud del regreso del país a los mercados internacionales, si bien hubo voces en contra.
El proyecto de ley en debate deroga la Ley Cerrojo y modifica la Ley de Pago Soberano, sancionadas durante el kirchnerismo como parte del acuerdo alcanzado con los holdouts que litigan contra el país en el juzgado de Thomas Griesa.
Las voces de los especialistas
El primero en exponer fue Mario Blejer, asesor económico de Daniel Scioli y exfuncionario del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Central (BCRA), quien explicó que “al no haber tenido acceso al crédito hemos perdido oportunidades de inversión y de desarrollo” durante los gobiernos kirchneristas.
Blejer sostuvo que el acuerdo al que se llegó con los buitres es “infinitamente mejor de lo que veníamos”, aunque destacó que “este proceso comenzó con el Gobierno anterior”.
El especialista resaltó además que este acuerdo “cambia una deuda cara por una deuda más accesible” y “reduce el endeudamiento” del país.
A continuación, el asesor económico de la UCR y expresidente del Banco Central, Javier González Fraga, destacó que “son muchas las puertas que se nos abren en materia de financiamiento: vivienda, cloaca, cosas que mejoran la vida de la gente”, y precisó que el país podría obtener “inversiones en telefonía, trenes, electricidad y petróleo”.
Sin embargo, Fraga confesó que le parece “elevada” la tasa de interés del 7,5 promedio que obtendría el país por los 15.000 millones de dólares que pretende el gobierno de Macri para pagar a 5, 10 y 15 años.
El presidente del Banco Galicia y vicepresidente primero de la Asociación de Bancos de Argentina (ADEBA), Sergio Grinenco, también apoyó el acuerdo con los buitres, al señalar que “el acceso a los mercados de capital internacionales va a redundar en forma sumamente positiva en cuanto al crecimiento del financiamiento privado en los próximos años”.
Adelmo Gabbi, presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, dijo que “a pesar de que la tasa impuesta por el juez Griesa es injusta, que nada tiene que ver con el mercado, se transformó en un reloj caro para el país; no para el Gobierno, sino para los ciudadanos del país que tenemos que pagar esta deuda vergonzosa que tiene una tasa de interés que en este momento del mundo es ridícula”.
Gabbi opinó que el regreso de Argentina el mercado internacional de deuda facilitará las inversiones y el desarrollo del mercado interno y de la exportación, ayudaría a financiar el déficit y a dejar el crédito interno para las pymes.
“Como hombre del mercado, nos podría permitir salir de la categoría de país fronterizo que detentamos desde el año 2009 en el mundo y volver a ser un país emergente e iniciar el camino del desarrollo definitivo”, consideró el titular de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
A favor del acuerdo también se mostró el extitular del BCRA entre 2013 y 2014, Juan Carlos Fábrega, quien remarcó que “salir del default nos mejorará sensiblemente nuestra visión en el mundo”.
Fábrega auguró que “vamos a ver descender la tasa (de interés) en el tiempo” y que eso “permitirá que lleguen inversiones genuinas” y “financiamiento para bienes de capital”.
En tanto, como exsecretario de Finanzas durante el primer canje de deuda en 2005, el economista Guillermo Nielsen consideró que “estamos frente a un buen acuerdo” y arriesgó: “Si no es el mejor, está muy cerca de ser el mejor”.
En una breve presentación, Nielsen criticó duro las últimas negociaciones encaradas por el kirchnerismo en los últimos cuatro años y hasta habló de un “espíritu de estudiantina” con el cual “se tomó con superficialidad extrema un caso muy difícil”.
El primero en manifestarse en contra del proyecto fue Marcelo Ramal, economista y legislador porteño del FIT, quien denunció que “este acuerdo aspira a abrir un proceso de refinanciación de deudas existentes”. “Se quiere cerrar el acuerdo con los buitres para luego abocarse al reciclaje de este conjunto de deuda”, aseguró Ramal, al comparar al gobierno de Macri con los de Carlos Menem y Fernando De la Rúa.
En este marco, el dirigente de izquierda embistió contra el kirchnerismo al desmentir que durante los últimos 12 años el país se haya “desendeudado”. En este sentido, sostuvo que “el actual Gobierno le pone la puntada final a este proceso de rescate, de recauchutaje de esta deuda que llevó adelante el kirchnerismo durante todos estos años”.
Ramal también cuestionó el acuerdo con los buitres por mantener la jurisdicción extranjera, al tiempo que advirtió que “solo habrá deuda que tenga como precondición el ajuste”. “Las crisis de deuda de nuestro país han sido parteras de grandes desplazamientos políticos”, vaticinó el economista sobre el futuro del gobierno de Cambiemos.
Otro invitado que criticó el proyecto de ley fue el exdiputado nacional y exviceministro de Economía Roberto Feletti, quien advirtió sobre los riesgos de “litigiosidad futura de los holdin y holdout” si se aprueba la ley.
El actual secretario de Hacienda de La Matanza alertó que existe una “clara diferencia en la oferta entre los que tienen sentencia de Griesa y los que no la tienen”, por lo que “es lógico pensar que un holdin se va a sentir tentado de reclamar”.
También fue muy crítico del acuerdo el economista Jorge Gaggero, del Centro de Economía y Finanzas para el Desarrollo de la Argentina (CEFID-AR): afirmó que el gobierno de Macri inicia un “tercer ciclo largo de endeudamiento” en el país y que la nueva deuda para pagar la deuda con los buitres “va a estimular la fuga estructural del dinero ilegal que nuestro país sufre”.
Ante los legisladores, el especialista preguntó “qué garantías hay para que no se repita la fuga como en el período 1976-2001”, cuando la deuda pública permitía financiar la exteriorización de capitales como parte del proceso de valorización financiera.
Además, el experto advirtió que “acá hay unos agujeros terribles que dejan muchas incógnitas respecto de eventuales conflictos y extensión de la deuda que se estima”. “Se le tiene que caer la cara al Gobierno por pagarle la cuenta de NML. ¿Quién garantiza que no vengan los reclamos de todas las cuentas legales?”, protestó.
El economista y periodista Alfredo Zaiat opinó por su parte que “no es cierto que si no se aprueba este acuerdo necesariamente hay que hacer un ajuste mayor” y agregó que “el acuerdo deja abierta la posibilidad de nuevos juicios”.
En el plenario también expusieron el exsecretario de Finanzas del kirchnerismo, Pablo López; el presidente del Merval, Claudio Pérès Moore; el exministro de Economía de Santa Fe, Ángel Sciara; Hugo Yasky y Julio Gambina, de la CTA; y Juan José Cruces, de la Universidad Di Tella, entre otros.
