La grieta dentro del bloque volvió a quedar evidenciada en una nueva votación dentro del recinto. La convivencia es complicada, pero se demora la oficialización de la ruptura.
A una semana del famoso tuit del titular del PJ porteño y líder del sindicato de los porteros, Víctor Santa María, quien “anunció” la ruptura del Frente para la Victoria en la Legislatura porteña, el bloque de legisladores comandados por Carlos Tomada evidenció su grieta en una votación dividida dentro del recinto.
De los 12 diputados que integran el bloque, fueron el grupo de Gabriel Fuks, María Rosa Muiños, Silvia Gottero y Claudio Heredia quienes acompañaron al macrismo en la aprobación de la ley para la creación de la Villa Olímpica, propuesta por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta.
Pese a las intenciones del exministro de Trabajo de mantener la “unidad”, las diferencias entre los legisladores del núcleo kirchnerista duro y los que responden al peronismo tradicional se hizo notar desde el primer momento. Y ante la difícil convivencia, la fractura se trató de evitar buscando coincidencias.
Este jueves se esperaba que se oficializara la ruptura, pero finalmente no sucedió. Por estas horas el Frente para la Victoria vive una interna caliente, y se especula que la división no sólo termine con la conformación de dos nuevos bloques.
Quien todavía no ha sentado su posición es el diputado Gabriel Fuks, que responde a la agrupación la Corriente Nacional de la Militancia, espacio de Daniel Filmus. La posibilidad de que Fuks forme su propio monobloque no está descartada.
