Por Dalile Antúnez. La co-directora de ACIJ opina sobre la deuda pendiente en torno a la designación del Defensor del Niño y del Pueblo.
El Senado de la Nación demora la designación del Defensor del Niño. Sin razón aparente y luego de más de diez años, sigue sin iniciarse el procedimiento para nombrar a quien debe ejercer la defensa de esta población vulnerable y carente de representación. Sólo falta que el senador Federico Pinedo designe a los representantes de la Cámara Alta.
En los últimos días se difundieron nuevos datos que confirman la alarmante situación de vulnerabilidad de los niños, niñas y adolescentes. El INDEC mostró que este sector de la población casi duplica en pobreza al resto, lo que representa casi 50% de pobres. Esto significa que en la Argentina hay seis millones de niños en la pobreza y más de un millón de niños indigentes. Por otro lado, los pocos datos existentes sobre violencia machista que cobraron estado público en el marco de #Niunamenos, revelan que muchas de las víctimas son niñas y adolescentes. De hecho, la última marcha que conmovió al país se generó a partir del femicidio de una adolescente de 16 años.
Frente a esta crítica situación de la infancia en la Argentina, es escandaloso notar que el puesto de Defensor/a de Niñas, Niños y Adolescentes creado por la ley 26061 en el año 2005 se encuentra vacante hace más de diez años -y, a diferencia del cargo del Defensor del Pueblo, también vacante hace cinco años, éste nunca fue ocupado desde su creación-. Las designaciones de ambos cargos dependen del Congreso Nacional, por lo que el incumplimiento estatal en ambos casos le resulta imputable.
El 8 de septiembre de este año Emilio Monzó decidió dar un paso importante hacia el cumplimiento de esta deuda, mediante la integración de los cinco miembros de la Cámara de Diputados que deben conformar la comisión bicameral para la designación del/la Defensor/a. Sin embargo, el Senado de la Nación sigue demorando la designación de los cinco Senadores que restan para la integración de la bicameral. La designación de los Senadores que restan es responsabilidad de Federico Pinedo, en su carácter de presidente provisional del Senado.
Aún evidenciándose una situación tan extrema en lo que concierne a la infancia, se sigue demorando la conformación de la bicameral indispensable para la defensa y protección de los derechos de la niñez. Con el año legislativo casi finalizado, los decisores públicos están, una vez más y con las sucesivas dilaciones, postergando indefinidamente la discusión de un asunto urgente.
Sería lamentable que la preocupación por otros temas aparentemente más relevantes para la agenda política permita que éste quede nuevamente postergado. A esta altura es necesario recordar que la infancia no es el futuro, la infancia es hoy.
*Co-directora de ACIJ (Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia).