El senador puntano Daniel Pérsico le planteó al jefe de Gabinete su inquietud por los despidos en Radio Nacional, de los que los últimos días se había hecho eco su bancada y por los que el propio secretario del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, concurrió a la Cámara alta para brindar explicaciones.

En este caso Pérsico advirtió sobre una supuesta “discriminación” de los trabajadores a la hora de decidir sus despidos, ante lo cual Peña replicó brindándole la “absoluta tranquilidad a su preocupación. Este Gobierno no tolerará ningún acto de persecución política, ni persecución ideológica”, y aclaró que esas imputaciones no tienen “ningún fundamento más allá de la proyección de los prejuicios de los que no piensan igual”.

“Creo que es injusto e injustificado plantear subrepticia o explícitamente que propiciamos una actitud de confrontación, de violencia; lo importante es si estamos todos de acuerdo en cual es el camino institucional y democrático para saldar nuestras diferencias”, planteó el jefe de Gabinete al rechazar enfáticamente que la administración de Cambiemos busque acrecentar la grieta. Por el contrario, recordó que Cristina Fernández de Kirchner ni siquiera se prestó a facilitar el traspaso del mando presidencial.

“Mayor violencia institucional creo que no ha habido; ni siquiera asistió a la ceremonia”, reprochó Peña.

Asimismo señaló que “le podemos acercar el detalle de los grupos de empleados públicos discriminados en el Gobierno anterior, hay decenas y decenas de casos, y todavía ocurren en algunas provincias”. Por eso Peña pidió que “tengamos la memoria completa de lo que ha pasado en los últimos años, porque hoy no está pasando”.

En el caso puntual de lo ocurrido en Radio Nacional, recordó que Lombardi estuvo en el Senado la semana anterior y en esa oportunidad habló del compromiso suscripto para que los cargos directivos de la gestión se vayan cuando concluya esta gestión. “Insisto, no creemos que haya ninguna persecución política ni ideológica”, remarcó, y aseguró que la decisión de esta administración es “si trabaja o no ese empleado público”, y no a qué sector pertenece.