Calificaron como “profundamente antidemocrática” la denuncia del Gobierno contra legisladores kirchneristas y de izquierda “constituye un pésimo antecedente institucional”.
El bloque de diputados del FpV-PJ salió a repudiar el accionar del Gobierno de Mauricio Macri al denunciar a legisladores opositores por los hechos del 14 de diciembre argumentando haber “entorpecido la actuación de la Gendarmería y franquearle la entrada a los manifestantes al Congreso”.
Para la bancada que conduce Agustín Rossi, dicha actuación es “profundamente antidemocrática y constituye un pésimo antecedente institucional. Queremos decirle a toda la sociedad argentina que estamos ante un nuevo capítulo de persecución política y judicial a dirigentes opositores, llevado adelante por el presidente de la Nación que claramente no tolera las voces que lo critican y piensan distinto”.
“Lo que sucedió el pasado 14 de diciembre fue una represión brutal sin precedentes en los últimos años de la democracia de nuestro país, ejecutado por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich. Como consecuencia 7 diputados nacionales de distintos bloques sufrieron heridas y lesiones por parte de las fuerzas de seguridad”, denunciaron.
A través de un comunicado, el FpV-PJ dice tener claro que “la acción de nuestros diputados evitó el aumento de la violencia represiva”, recordando luego que al día siguiente los diputados Agustín Rossi, Martín Doñate y Rodolfo Tailhade hicieron una denuncia penal “por la violencia llevada adelante por Gendarmería y las lesiones que habían padecido diputados opositores”.
Los diputados dicen no salir de su asombro ya que “es la primera vez desde la recuperación democrática que un Gobierno denuncia penalmente a diputados opositores. Queda claro que en la Argentina no tenemos Estado de derecho, vivimos en un Estado de excepción”.
“Ya lo dijimos y no dejamos de repetirlo: lo más grave del 14 de diciembre fue la represión que repudiamos enfáticamente -agregan-, como así también condenamos que desde el Gobierno de Cambiemos se utilice a la denuncia como forma sistemática de resolver las cuestiones políticas”.
El comunicado concluye pidiéndole a los dirigentes del oficialismo que “sean más tolerantes y estén abiertos a admitir disidencias, respetando a quienes piensan distinto. A su vez les aclaramos que no son opositores los que hacen seguidismo institucional sino los que responsablemente le decimos al Gobierno Nacional las cosas que no quiere oír, porque creemos que con muchas de sus acciones nos están llevando por un camino absolutamente equivocado”.
