Por Carolina Ramos

Cristian Ritondo se convertirá, a partir del 10 de diciembre, en el jefe del bloque Pro, que tendrá nada menos que 51 diputados. Encaminado a ser una de las figuras de la oposición parlamentaria, el actual ministro de Seguridad bonaerense busca prevenir rebeliones en el bloque y apagar focos de conflicto abiertos por su designación y la amenaza de ruptura de un grupo que responde a Emilio Monzó.

En la sede del Bapro, Ritondo concedió a parlamentario.com la primera entrevista desde que fue electo. “Quiero discutir todos los temas dentro del bloque y tengo la responsabilidad de mantener la unidad”, aseguró, y agregó: “Debemos defender nuestra gestión de gobierno y también ser una oposición democrática, constructiva, que no ponga palos en la rueda, sino que ayude a sacar las herramientas que necesita el nuevo gobierno, sin renunciar a los valores que sostuvimos durante nuestro gobierno y nuestra campaña”.

El futuro legislador nacional propuso que todos los referentes de Cambiemos “se sienten en una mesa para tomar decisiones”, y por otra parte señaló: “Tenemos que aprender de los errores, pero creo que dejamos una Argentina distinta a la que recibimos en 2015”.

– ¿Cómo fue la reunión que mantuvo con el presidente la semana pasada?

– Con el presidente, siempre que hablamos, hablamos de trabajo y de los desafíos que tenemos para el futuro, y uno de los desafíos que hablamos para el futuro era esta idea de presidir el bloque. El presidente me había convocado, en caso de que ganáramos, para presidir la Cámara. Me expresó la confianza que me tenía para este rol, que institucionalmente va a ser muy importante para el Pro. Ahí no solamente tiene que ver el presidente, sino también todo el conjunto del Pro y los diputados, con muchos de los cuales ya venía trabajando y hablando, como Carmen Polledo; y los referentes como María Eugenia (Vidal), que es sin duda nuestra jefa en la provincia de Buenos Aires, y Horacio Rodríguez Larreta. Ellos tienen importancia porque estamos hablando del Pro, no de todo el espacio, que es mucho más grande, con la UCR y la Coalición Cívica. Hablamos de la idea de mantener esa fuerza como un interbloque con 119 diputados, porque la unidad es fundamental para trabajar. Por supuesto, desde nuestro bloque tenemos la responsabilidad de defender nuestra gestión de gobierno, y también de ser una oposición democrática, constructiva, que no ponga palos en la rueda, sino que ayude a sacar las herramientas que necesita el nuevo gobierno, sin renunciar a los valores que sostuvimos durante nuestro gobierno y nuestra campaña.

– ¿Será el jefe del bloque Pro?

– Sí, si me acompañan todos los diputados, que hasta ahora así lo han expresado.

– Hubo malestar de algunos diputados -sobre todo del interior del país- que advirtieron que esa decisión no fue tomada en conjunto…

– Habría que preguntarle al presidente de la Nación, que es el líder del partido. Yo no le puedo decir a él cómo tiene que proceder, o lo que tiene que decir. Con todos ellos yo hablé después, porque yo necesito trabajar con cada uno de los diputados en el día a día. Por supuesto, los de Ciudad y provincia de Buenos Aires me conocen porque venimos trabajando hace mucho, y con algunos del interior también. Había muchos con quienes solo nos habíamos visto en un encuentro o alguna reunión. He aprovechado cada momento, vengo conociendo, trabajando, dando las ideas que tengo para trabajar, que son las ideas que ya conocen los que han trabajado conmigo en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. Quiero un bloque que sea participativo, que tenga reuniones semanales, donde se traten los temas, la importancia de las comisiones. Quiero que la conducción del bloque no sea solamente de un presidente, sino que también tenga una mesa de bloque. Quiero discutir todos los temas dentro del bloque y tengo la responsabilidad de mantener la unidad. Por suerte hay muchos diputados de la Ciudad de Buenos Aires que conocen cómo lo hice.

– El mendocino Omar De Marchi se quejó públicamente de una supuesta “dedocracia”…

– Con De Marchi he hablado y le tengo mucho respeto y cariño personal. Fuimos diputados juntos entre 2005 y 2007. Sé que es muy bueno en el recinto y es un jefe territorial del Pro en Mendoza. Yo vengo a unir, no a separar. Respeto a todos los diputados, todos los diputados valen uno, y creo que Omar De Marchi va a ser uno de los hombres más importantes dentro del bloque.

– ¿Qué pasa con los diputados alineados con Emilio Monzó que amenazan con irse del bloque Pro? ¿Los ve afuera?

– Es una decisión que yo no tomo. Por supuesto quiero que estén adentro y que trabajemos juntos. Y el presidente no quiere minibloques, sino que quiere tres bloques fuertes de las tres fuerzas políticas de la coalición de gobierno.

– ¿La presidencia del interbloque quedará para el radicalismo?

– Lo que sirva para la unidad. Es algo que charlaremos después, todavía no lo hemos charlado. Todas mis acciones van a ser para la unidad, para tener una oposición fuerte que garantice la libertad y la democracia, como dijo el presidente.

– Elisa Carrió fue muy crítica suya, ¿qué opina de su salida de la política?

– Respeto muchísimo su decisión. Ha sido una de las constructoras más importantes que tuvo este espacio. Dejó todo, y estoy seguro de que si en algún momento la República no existe, va a estar de nuevo.

– La Cámara de Diputados quedó extremadamente polarizada y en el Frente de Todos aseguran tener de aliados a bloques provinciales que les garantizarían un número mayor al de Juntos por el Cambio, ¿cuál será la estrategia de ustedes? ¿Qué alianzas van a salir a buscar?

– Es temprano para hablar de eso. Seguramente habrá temas que conformen a distintos sectores y que harán ampliar la base que tenemos; seguramente habrá leyes que acordaremos reformular con otros sectores, y otras donde estaremos a favor de lo que propone el Ejecutivo. En realidad no decimos ‘tenemos 119 de este, más 7 de este, más 4 del otro’. Habrá leyes que compondrán una mayoría de gobierno, y habrá leyes que compondrán una mayoría de la oposición.

– ¿Van a ser una oposición constructiva?

– Sin dudas. Yo no creo en los palos en la rueda: creo en los consensos, creo en darle las herramientas al gobierno, porque detrás de cada ley hay argentinos a los cuales nosotros tenemos que defender, porque fuimos votados para eso. Pero también vamos a defender lo que nosotros sostenemos, y eso lo sostuvo casi un 41% de la población.

– ¿Qué relación tiene con Sergio Massa y cómo lo ve en el rol de presidente de la Cámara?

– Tengo una relación personal, soy amigo. Estamos parados en lugares diferentes y actuaremos con la responsabilidad que nos exige el momento. Estamos en un momento que exige a los dirigentes tener una responsabilidad sobre el país. Facilita el diálogo el hecho de que tengamos buena relación personal, pero ese no será el elemento que defina la forma en que vote nuestro bloque.

– Hay varios anotados para liderar la oposición, ¿cómo se va a resolver ese tema?

– Falta mucho. Una forma de resolverlo hoy es que todos nos sentemos en una mesa para tomar decisiones. Es juntos. Horacio ha hecho una elección impresionante en la Ciudad de Buenos Aires; María Eugenia sigue siendo una persona que ha aportado millones de votos en esta elección y sigue siendo una referente muy fuerte a nivel nacional y en la provincia de Buenos Aires, donde tiene un Senado con mayoría, un bloque muy grande de diputados, 62 intendencias… después hay muchos diputados provinciales que han hecho una elección interesante, y el radicalismo ha hecho un buen papel en muchas provincias, entre ellos (Alfredo) Cornejo.

– ¿Qué replanteos se hacen pensando en ganar nuevamente una elección?

– Muchos. Viene un tiempo de reflexionar, como lo hicimos después de las PASO, después de haber escuchado, de haber caminado. Cada persona con la que hablamos nos hizo pensar distinto para las elecciones nacionales, con mucha más cercanía. Aprender de los errores que cometimos es sustancial. Todo gobierno que hace, comete errores. Los que no cometen errores son los que no hacen. Un gobierno que toma decisiones todos los días comete errores. El ciclo económico que había en Argentina y en el mundo no nos acompañó. Nos tocó sequía, nos tocó un ciclo económico donde los créditos se cerraron y donde el mundo se cerró más. Tenemos que aprender de los errores, pero creo que dejamos una Argentina distinta a la que recibimos en 2015.

– ¿Qué espera de la gestión de Alberto Fernández?

– Yo espero que le vaya bien, porque si le va bien a Alberto Fernández le va bien a los argentinos. Para ganar una elección no hay que esperar el mal del otro, hay que superar al otro. Nosotros esperamos que a Alberto le vaya bien y superarlo con nuestras propuestas, nuestras ideas y nuestro modelo.