La Justicia condenó este lunes al sacerdote italiano Nicola Corradi a 42 años de prisión y al cura argentino Horacio Corbacho a 45, por abusos perpetrados contra menores en un colegio para niños sordos. El tribunal también condenó al jardinero Armando Gómez a 18 años de cárcel.

El fallo se emitió al cabo de u n juicio de más de tres meses en el que quedaron comprobados 20 hechos de abusos y violaciones subridos entre 2005 y 2016 por una decena de alumnos del Instituto Antonio Próvolo para niños sordos y con problemas de audición de la localidad mendocina de Luján de Cuyo.

El senador Julio Cobos, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto del Senado, manifestó al conocerse la sentencia que “si bien no hay forma de reparar el daño físico, moral, psicológico y social de las víctimas directas y sus familias por este tipo de delitos aberrantes; la sentencia ha sido histórica, dándose por probado los delitos y cercana a las solicitadas por la defensa”.

“Espero que esta condena sirva para que nunca más suceda algo así. Acompañamos a las víctimas y a sus familiares”, finalizó Cobos.