El legislador cree que el Estado debe concentrar sus esfuerzos en combatir el narcotráfico, asistir a los adictos y concientizar sobre las consecuencias negativas asociadas al consumo pero respetando las decisiones autónomas de los consumidores.
El presidente del bloque de diputados nacionales de la UCR, Ricardo Gil Lavedra, anunció que insistirá con su proyecto para reformar la ley de estupefacientes y despenalizar la tenencia, siembra y cultivo con fines de consumo.
“Esta nueva iniciativa reproduce, en gran medida, el proyecto que presentamos en el 2010 junto a los diputados de la UCR, Ricardo Alfonsín, Jorge Chemes, Mario Fiad, María Luisa Storani y Oscar Albrieu, pero da cuenta de los avances que se han verificado desde su presentación al día de la fecha, como la sanción de la nueva ley de Salud Mental y, también, de las observaciones y críticas recogidas en las distintas instancias de discusión de las que hemos participado a lo largo de estos dos años”, explicó Gil Lavedra.
El diputado explicó que “el fallo Arriola ha contribuido a devolver la discusión al centro de la escena, pero todavía subsisten numerosos problemas que requieren de una reforma legal para ser solucionados”.
“La situación de las personas empleadas por las redes de tráfico para transportar estupefacientes a través de fronteras es una de ellas. Habitualmente se trata de mujeres en situación de vulnerabilidad y que al no tener domicilio fijo en el país permanecen detenidas durante toda la duración del proceso. Hoy 7 de cada 10 mujeres privadas de su libertad, 9 de cada 10 si hablamos de extranjeras, lo están por delitos vinculados a las drogas. Debemos terminar con el encarcelamiento indiscriminado y sin condena de personas que, a veces, pueden ser ellas mismas víctimas”, enfatizó Gil Lavedra.
El titular del radicalismo en la Cámara baja explicó que “nuestro sistema, además, se sigue concentrando en perseguir a consumidores y casos de venta al menudeo, en lugar de a los grandes traficantes”.
Según dijo, “la reforma no es condición suficiente para cambiar esta situación, pero es un primer paso necesario”. “Debemos avanzar hacia un sistema más sofisticado que deje de equiparar a todos los actores y concentre sus esfuerzos en perseguir a los principales responsables, asistir a aquellos que hayan desarrollado una adicción y brindar mayor información sobre las consecuencias negativas asociadas al consumo respetando las decisiones autónomas de los consumidores”, concluyó Gil Lavedra.
