Cerca de las 2 de la madrugada fue el turno de la diputada libertaria Lilia Lemoine, quien le habló todo el tiempo al kirchnerismo y la izquierda. “Parece que no le quieren dar poderes al presidente Milei porque están ofendidos -dijo-. Porque en vez de mirar al Congreso, que tiene un ego gigante, el presidente decidió mirar al pueblo, que es el que lo votó y lo eligió”.

“Entonces, por una cuestión de egos no le quieren otorgar al presidente de la Nación los poderes que necesita para salir de una emergencia que son tres veces menos que los que les votaron sin dudar al presidente títere que tuvieron en su propio gobierno. Y por si fuera poco, el presidente Milei los tendría solo por un año”, expresó.

Lemoine consideró “absolutamente ridículo” lo que estaba sucediendo y les advirtió a los legisladores de lo que consideró la izquierda que “la gente que los está mirando y lo va a pensar: ¿Cómo puede ser que estén negándole una facultad que les dan a todos? Porque les cae mal que les dijo ratas; porque no los miró y les sonrió cuando vino acá al Congreso por primera vez. Después vino y les habló, pero tampoco les gustó”.

Para la diputada libertaria, “les preocupan los pobres y la realidad es que lo que quieren es multiplicarlos, porque no hay nada peor para el pobre que el impuesto inflacionario”.

Lemoine agregó que “el kirchnerismo y la izquierda se dedican a tratar de convencer a la gente con resentimiento y mentiras de que las dádivas y los políticos son la solución a sus problemas”, pero les advirtió que “lo que los saca de los problemas es el trabajo, una economía creciente, la integración con el mundo. Pero insisten en que quieren una fórmula que aplicaron durante 20 años y no les funcionó, y ahora sí creen que les va a funcionar”.

Sobre el final, ponderó la reforma laboral. Artículos trabajados por la UCR, admitió, y aseguró que al verlas quedó “encantada”. Concluyó comunicando que la Asociación de Emprendedores e la Argentina asegura que en caso de aprobarse la ley de Bases y la reforma laboral, “en cuatro años pueden crearse un millón de empleos legítimos”.