La diputada justicialista Graciela Camaño reclamó tener cuidado con las expropiaciones de empresas y diferenció el caso de Aerolíneas Argentinas con el de Aguas Argentinas. “Son situaciones totalmente diferentes”, dijo en el programa Del Arco político, que emite Radio América, donde aclaró que “el tema Suez lo conozco bastante porque ahí hay unos incumplimientos brutales a la salud pública”.

Empero, sostuvo que “no podemos ponernos en orden a las expropiaciones, porque también significan tomar el control y es como control y cuenta nueva. Y francamente en el caso de Aerolíneas Argentinas no se quiere perder tampoco la línea de bandera, hay una serie de cuestiones que hacen a la oportunidad política”.

“Yo no participo con tanta alegría en la expropiación –aclaró la diputada peronista-. A mí me parece que esta toma de responsabilidad por parte del Ejecutivo, este visualizar correctamente cual es el precio de la empresa, en orden a los activos y los pasivos, es el camino correcto”.

Graciela Camaño remarcó que “Argentina también está siendo vista por el mundo, las relaciones con España no son menores, aunque a algunos les guste y a otros no, no son menores, son relaciones muy importantes para nosotros como país, nosotros necesitamos de España, pero también tenemos que develar a aquellos empresarios inescrupulosos que han venido a nuestro país creyendo que podían hacerse la América y a veces en connivencia con algunos funcionarios han hecho desastre”.

Cuando se le preguntó si suscribía los dichos de Hugo Moyano, quien pidió “que la deuda la paguen los gallegos”, Camaño aclaró que “no me parece que esa sea la síntesis de lo que está pasando acá, en orden al respeto que yo le menciono, a la necesidad de tener relaciones correctas con España, porque para nosotros es la puerta de España a Europa”.

“En fin, yo creo que nosotros tenemos que ser cuidadosos y no participo de una frase tan vulgar –destacó-. Lo que sí digo es que acá nosotros no podemos decirle a los empresarios argentinos,aprobándole la deuda de esta gente, aceptándola y poniéndole la plata: ‘mire, hay que ser corruptos, hay que llevarse la plata, hay que concursar las empresas, hay que embromar a los obreros y así el Estado se hace cargo’. Me parece que ese es el comportamiento que nosotros pretendemos que no tengan los empresarios”.

En otro orden, reconoció que hay un cuestionamiento al liderazgo de Néstor Kirchner en el Partido Justicialista”.

“Es indudable, cuando hay una serie de compañeros que están trabajando, militando y que todo esto lo hacen a la luz pública. No forma parte de mi magia en la apreciación política”, dijo.