La Cámara de Senadores de la Nación convirtió en ley el proyecto que exime por dos años de impuestos la importación de gasoil hasta un volumen de dos millones de metros cúbicos en cada período anual, para abastecer la demanda de ese fluido que se encuentra en escasez.
La iniciativa fue debatida en pocos minutos y cosechó 47 votos favorables que provinieron del bloque del PJ-Frente para la Victoria más algunos aliados, mientras que la UCR y otros bloques menores lo hicieron por la negativa.
La aprobación salió así en tiempo récord, y esta ley permitirá importar 800 mil metros cúbicos de gasoil -más el 20 por ciento- durante 2006 y una cantidad similar en 2007.
En primer término, la normativa recibió la aprobación de la Cámara de Diputados y luego por la noche, el Senado convirtió en ley la iniciativa, en un trámite expeditivo.
Durante el debate en Diputados, el oficialismo modificó el proyecto original, presentado por el jujeño Carlos Snopek, y extendió la importación por dos años y no por uno, como indicaba el dictamen aprobado en comisión.
La iniciativa fue cuestionada por la oposición, que sostuvo que de este modo sólo se busca -como afirmó la radical Silvana Giudici- "emparchar la crisis energética de la cual el Gobierno no quiere hablar".
Snopek dijo que el país "necesita este instrumento para abastecer la demanda interna" y fue respaldado por el vicepresidente de la Comisión de Energía del cuerpo, el mendocino Alfredo Fernández, quien señaló que la importación de gasoil es consecuencia "de que el país crece al 9 por ciento y la demanda es del 10,5 por ciento".
Pese a los argumentos oficialistas, los opositores acusaron al Gobierno de tener una "política de hidrocarburos que favorece elsaqueo" y -como subrayaron el economista de la CTA, Claudio Lozano y la arista Marta Maffei- de no garantizar la inversión para la exploración de pozos por parte de las petroleras.
El proyecto fue impulsado en la Cámara baja por la Comisión de Energía y Combustibles que preside el miembro del Frente para la Victoria, Alfredo Fernández.
El diputado de izquierda Carlos Tinnirello recordó que "cuando el presidente Kirchner era gobernador de Santa Cruz recorrió los despachos de los diputados para que dieran quórum para garantizar la privatización de YPF".
"La Argentina ha consumido las reservas que fueron exploradas a principios de los 90 por YPF y bajó la producción de los pozos argentinos porque tenemos falta de inversión en exploración, refinación y distribución", añadió Lozano.
El economista subrayó que "cuando no hay regulación en el sistema capitalista hay saqueo y eso es lo que está ocurriendo en el sector de hidrocarburos".
Por su parte, Maffei precisó que "según los datos de la Secretaría de Energía entre 1995 y 2003 se invirtieron 13 mil millones de dólares en explotación petrolera, pero en el mismo período sólo se invirtieron 1.600 millones de dólares en exploración de pozos y destilería".
Mientras, desde la UCR el jujeño Miguel Giubergia aseguró que "con la importación de 500 mil metros cúbicos durante este año se beneficiaron a las grandes empresas petroleras".
En el Senado, en tanto, el senador santacruceño Nicolás Fernández defendió el proyecto argumentando que "lo único que se pretende hacer es asegurar la provisión interna de gasoil".
"El país consume más gasoil porque está creciendo. El Estado previó una discusión de control con las operadoras petroleras y se creó la empresa nacional de energía y hace más de siete meses duerme en diputados el beneficio impositivo para explorar cuencas petroleras", fustigó Fernández.
En cambio, la chaqueña radical Alicia Mastandrea dijo que "no es adecuado que este sea el método para solucionar este problema".
"El sacrificio fiscal que se le impone a la Argentina es de alrededor de 550 millones de pesos", sostuvo Mastandrea, quien además apuntó contra la "baja calidad del gasoil importado de Venezuela".
"Este tiene un alto contenido de azufre y no se acerca a las normas exigidas por la Secretaría de Energía de la Nación", sentenció Mastandrea.