El gobernador bonaerense insiste en su intención de lograr otro mandato al frente del Ejecutivo, y ya se hicieron presentaciones ante la Junta Electoral.
La presentación de un recurso de certeza por parte de Felipe Solá, que busca renovar su cargo como gobernador por otro período, cambió de manera singular los posicionamientos en el partido de gobierno y la oposición salió con los tapones de punta a enfrentar esta intención, por lo que no descarta una avalancha de apelaciones en caso que la Junta Electoral falle a favor del mandatario.
La estrategia felipista de acudir a la Junta Electoral no sólo requiere de una cuidadosa ingeniería jurídica, sino también de una planificación política de corto y mediano plazo. El escrito será presentado a través de dos sellos: el del Partido de la Victoria y el del Polo Social, dos partidos fundadores de la Alianza FpV.
Los observadores no dejan de advertir que el felipismo “no se conforma” con el Partido de la Victoria, cuyo titular bonaerense es el actual vicepresidente II del Senado provincial, Aldo San Pedro, alguien que tuvo que “cambiar el rumbo de navegación”. El senador de Bragado entró con paso firme al Senado definiéndose como hombre del presidente Néstor Kirchner, y siempre se mantuvo distante tanto de la conducción del bloque como de las deliberaciones felipistas. De hecho, muchos señalan la existencia de consensos alcanzados “dentro y fuera” del FpV por parte del senador del noroeste. Está claro para todos que la ex mano derecha de la candidata Graciela Fernández Meijide, quien enfrentó al propio Solá en las elecciones del 99, “no está por convicción haciendo la presentación sino por lealtad a la Casa Rosada”. Por lo tanto, se concluye que el felipismo buscó “reaseguro” en el diputado nacional Francisco “Barba” Gutiérrez, quien facilitará el sello del Polo Social para que, junto al Partido de la Victoria, se realice la presentación ante la Junta Electoral.
Entre los defensores “incondicionales” de la candidatura de Solá se encuentra el jefe del bloque de senadores provinciales del FpV, Osvaldo Goicoechea, quien sostuvo, convincente y lacónicamente, que “la realidad es que Solá está habilitado por los artículos 122, 123 y 124 de la Constitución para un nuevo mandato” y consideró que “lo más importante es que Solá es el mejor representante de las políticas implementadas por el presidente Kirchner”. Remarcó además que “el gobernador es la síntesis del proyecto nacional y es el único candidato que nuclea a todos los sectores”.
Opositores
No se levantaron demasiadas voces desde la bancada del PJ, pero el diputado Julián Domínguez fue contundente: “Lo que se pretende es ganar tiempo y embarrar la cancha”. Planteó la imposibilidad legal en los artículos 123 y 124 y su correspondencia con el 90 de la Constitución nacional. Además, cuestionó la intervención de la Junta Electoral porque “hay organismo como el Tribunal de Cuentas que dependen del Ejecutivo”.
Según el diputado radical Gustavo Ferrari, “el gobernador se mimetizó con los intentos del Carlos Rovira de perpetuarse en el poder indefinidamente y ahora pretende que la Justicia avale sus pretensiones, lo cual es imposible porque la Constitución es clara y precisa: no permite su reelección”.
El bloque de diputados del ARI expresó “su más ferviente rechazo a la intención re-releccionista del gobernador Solá en momentos en los que la provincia de Buenos Aires se encuentra absolutamente parada”. El diputado Horacio Piemonte admitió que todavía no fueron discutidos en el seno del partido los pasos a seguir, aunque consideró que es un “contrasentido” por parte del mandatario bonaerense “estar pensando en la reelección con la Provincia en llamas”.
Junta polémica
Según lo que se establece en el artículo 62 de la Constitución bonaerense la Junta Electoral es el órgano que recibe y oficializa o no las candidaturas para cargos provinciales. Este órgano integrado por los presidentes de la Suprema Corte -Francisco Roncoroni-, del Tribunal de Cuentas -Eduardo Grimberg- y de tres cámaras de apelación del Departamento Judicial de La Plata. Recientemente surgió una disputa sobre quiénes deben ser los jueces de Cámaras que deben integrar este órgano, a raíz de una presentación de la Cámara del fuero contencioso administrativo, integrada por Gustavo Spacarotel, Gustavo De Santis y Patricia Milanta.
Hasta aquí integraban el órgano el titular de la Cámara penal -doctor Delbés- y los de las dos salas de Cámara del fuero civil y comercial -doctora Bourimborde y doctor Bizzio-, este último es el personaje de una “panfleteada” inédita en los tribunales platenses por las muchas -millones- razones que tendría para avalar la presentación felipista.