Mucho tiempo ha transcurrido desde que quien fuera conocido popularmente como El Lole dejara las pistas. Y mucho agua ha pasado bajo el puente, al punto tal de haberse incorporado Reutemann a la política, llegando a casi todos los estamentos más elevados a los que pueda aspirar un político: dos veces gobernador provincial, actual senador nacional, y hasta podría afirmarse que por decisión propia no es hoy el actual presidente de la Nación.

Reutemann no habla hoy en público de su pasado deportivo, aunque en rigor de verdad, casi no habla en general. El mérito en este caso fue de la revista de automovilismo Corsa, que en su vuelta a los kioskos lo entrevistó, logrando revivir aquellos tiempos en los que el Lole era un astro del circo de la Fórmula 1.

Y cómo no revivir la frustración que tuvo cuando perdió el campeonato mundial de F1 por apenas un punto en el 81. En la nota, le adjudicó buena parte de ese hecho al cambio de neumáticos.

“En realidad hay una decisión estratégica equivocada de Williams que es lo que creo que hace que yo pierda el campeonato –contó-, que es cuando ellos salen de Michelin para ir a Goodyear. Creo que es una decisión muy equivocada y hasta me queda la seria duda de que en ese momento haya habido algún tipo de manejo económico, porque a mientras yo estuve con Michelin era mucho más rapido que todos; por mil razones, pero también esencialmente porque Williams andaba muchísimo mejor con Michelín. Y a partir de que nosotros usamos Goodyear, no… Creo que hice cuarenta y pico de puntos con Michelin y con Goodyear hice 5 o 6… La diferencia fue impresionante”.

“Creo que ese fue el eje de la cuestión amén de una situación interna que se había puesto tensa”, destacó.

Reutemann rememoró su trayectoria y resaltó haber alcanzado la posición que tuvo teniendo en cuenta “cómo salí, a la edad que empecé… hoy parecería casi imposible -reconoció-. El haber logrado salir de donde salí, empecé a correr grande, llegar a la Fórmula 1, ganar en Fórmula 1, haberme mantenido, haber corrido en tantos equipos de Fórmula 1… pero claro, todo el mundo dice ‘no ganó el campeonato’”.

Reutemann no piensa que a los automovilistas argentinos les juegue en contra la nacionalidad. “No comparto esa teoría. Si aparece un Alonso o un Senna que rompa los relojes, no importa la nacionalidad”, aclaró.

Más adelante, el senador destacó que hoy le gustan todas las categorías del automovilismo, pero obviamente le pone más atención a la Fórmula 1, la cual –remarcó- “me gusta muchísimo, y esta época es algo espectacular”.

“¿Alguna vez se preguntó qué sería de su vida si hubiera salido campeón de F1?”, le preguntaron. “Sería muy lindo verme en los books del automovilismo como World Champion, pero en esa lista figuro con unos cuantos triunfos, cosa un poco lejana para un argentino hoy”, destacó sobre sí mismo.