Sumándose a la catarata de repudios, el titular del bloque radical en la Cámara alta señaló que los kelpers no son parte de la negociación por la soberanía de las Islas y pidió al Gobierno trazar una estrategia diplomática con representación parlamentaria.
El jefe del bloque radical en la Cámara alta, José Manuel Cano, cuestionó duramente el referéndum que se está llevando a cabo en Malvinas ya que viola las resoluciones de las Naciones Unidas así como el derecho internacional. “La Argentina rechaza de plano cualquier argumento presentado por el gobierno ilegítimo de las islas, como el Gobierno británico”, determinó.
El tucumano señaló que la comunidad internacional ha respaldado la cuestión de las Islas como una disputa por la soberanía “y no un caso de colonialismo, en el cuál un pueblo está sometido al dominio extranjero”. Así queda expresado en la resolución 2065 de la ONU firmada en 1965 que establece que el conflicto debe ser resuelto por Argentina y Gran Bretaña.
Según el senador, los kelpers no son “parte necesaria” de la negociación por la soberanía y además recordó los habitantes no pueden alegar que son una población originaria de las islas porque históricamente descienden de colonos británicos trasplantados al territorio luego de la expulsión criolla en 1833.
Finalmente, Cano afirmó que Malvinas debe ser una política de Estado y pide que el Gobierno analice con serenidad y profesionalismo una estrategia diplomática con las fuerzas políticas con representación parlamentaria y con organismos especializados en la materia.
