Tras las leyes sancionadas por el Congreso, distintos referentes de la oposición ratificaron que buscarán frenar la reforma judicial impulsada por el kirchnerismo precisamente por la vía judicial.

Al término de la sesión en la Cámara de Diputados, Elisa Carrió (Coalición Cívica-ARI) presentó ante el juez Rodolfo Canicoba Corral el escrito que envió a la Organización de Estados Americanos en el que advirtió sobre una “grave alteración del orden constitucional” en el país en base a la reforma judicial. También presentó pruebas del supuesto “pacto” entre el titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, y la presidenta Cristina Kirchner en torno a la reforma al Consejo de la Magistratura.

No fue la única. “Vamos a agotar todos los recursos ante la Corte”, insistió la diputada socialista Alicia Ciciliani al remarcar que los proyectos de la reforma “están viciadas de inconstitucionalidad”. En ese sentido la referente del FAP apostó a un triunfo opositor en las elecciones de octubre para “que el Gobierno no tenga las mayorías en ambas cámaras”: “Hay que evitar el avance de este poder unitario, que no sólo avanzó contra el federalismo quitándole recursos a las provincias, avanzó en el Congreso, siguió en las elecciones y hoy lo hace sobre la Justicia”, dijo.

En tanto, el riojano Jorge Yoma sostuvo que la reforma “es una de las leyes más indignas que votó el Congreso en 30 años de democracia” y consideró que los jueces “se van a basar precisamente en los debates parlamentarios para fijar sus sentencias” sobre las leyes.

En esa misma línea, Graciela Camaño acusó al oficialismo de “empiojar la votación porque no sabía si llegaba con los votos”. La diputada aseguró que tratará de llegar “a todos los que tengan legitimación para plantear la inconstitucionalidad de esta ley” de reforma al Consejo de la Magistratura, al considerar que es “proscriptiva”.