El diputado nacional Fernando “Pino” Solanas tiene grandes posibilidades de estar en el Senado a partir de diciembre. Pero si bien no estará en la próxima conformación de la Cámara baja, su palabra es importante para verificar las discrepancias internas respecto de la idea de buena parte de la oposición para avanzar sobre la presidencia de Diputados.

Solanas planteó como “un principio básico” de Coalición Sur, la agrupación que armó con Elisa Carrió, y detalló que el mismo es ser “absolutamente respetuosos de la institucionalidad, absolutamente republicanos. No nos van a mover de ahí”.

En ese sentido consideró que “cualquier intento de desestabilización o maniobra de ese tipo nos va a encontrar lejos”. Así las cosas, afirmó que “queremos continuidad institucional y que el gobierno pilotee la situación lo mejor que pueda hasta el último día de su mandato. En la Argentina la tradición es que la primera minoría se quede con la presidencia y eso lo vamos a respetar”.

Con vistas a las elecciones de octubre, dijo que su principal objetivo es “ganar la Ciudad”. En primer lugar situó a derrotar al Frente para la Victoria para el Senado, pero estimó que también están en condiciones de imponerse sobre el macrismo, cosa que consideró “un golpe muy duro para el proyecto presidencial de Macri”.

En diálogo con Tiempo Argentino, no se mostró molesto con la gente de Proyecto Sur que se fue rechazando su acuerdo con Elisa Carrió, admitiendo que “todos son valiosos y serán necesarios para la construcción de una nueva mayoría”. Estimó en ese sentido que “la Argentina no se puede gobernar sin un frente social, político y cultural, que abarque sectores de centro”.

“No se puede gobernar sólo con el flanco izquierdo”, admitió.

Admitió que puede haber fugas de los votos de UNEN para el Senado en cuanto a los que votaron a Prat-Gay y Terragno, y respecto a un futuro frente nacional con Hermes Binner reconoció “coincidencias y diferencias con muchas fuerzas”, aunque aclaró que “el escenario está muy verde todavía”.