Los coletazos de la gestión de Guillermo Moreno al frente de la Secretaría de Comercio aún se siguen sintiendo. Así lo dieron a entender este martes diputados nacionales de Unión Pro y el peronismo opositor, quienes advirtieron que hubo un 51 por ciento menos de publicidad en medios gráficos con respecto a hace un año, cuando comenzó a regir el cepo de manera “clandestina”.

Fue en el marco de una conferencia de prensa encabezada por los macristas Patricia Bullrich, Pablo Tonelli, Cornelia Schmidt-Liermann, Sergio Bergman, Eduardo Cáceres, Roberto Pradines –aliado mendocino-, el peronista opositor Carlos Brown y Silvana Giudici, por la Fundación LED.

Los diputados reconocieron que, si bien hubo una “flexibilización” en la medida, “todavía hay miedo” ya que “muchas empresas no se animan” a publicitar “por miedo a las represalias”, y lo hacen “tímidamente”.

“Hace exactamente un año, en uno de los tantos acuerdos de precios, hubo una orden clandestina de Moreno a todas las empresas de consumo que publicitaban sus ofertas en medios masivos”, recordó Bullrich, y añadió que “esto estuvo unido a una estrategia de control de la libertad de expresión” y a un “mecanismo de apriete” al que sumó la Ley de Medios.

Para Carlos Brown (Fe), “es grave que el Gobierno no se de cuenta de los errores gravísimos que está cometiendo”. “Cambian las personas, pero no las políticas”, indicó, en relación a los cambios en el Gabinete y la asunción de Augusto Costa como nuevo secretario de Comercio.

En tanto, Roberto Pradines (Demócrata de Mendoza) señaló que “el Gobierno nacional no tiene un plan referido a lo realmente gravitante, que es la economía”, al tiempo que Schmidt-Liermann apuntó que el Ejecutivo está ante una “oposición responsable y dispuesta a colaborar”.

“Estamos hablando de la verdad y la libertad. Nada puede edificarse a futuro bajo los cimientos de la mentira, y no somos libres si somos censurados. No permitirle publicitar a los empresarios es una práctica de censura”, sentenció el rabino Bergman.

Por su parte, la ex diputada Silvana Giudici precisó que, de diciembre de 2012 al mismo mes de 2013, “sólo la mitad de la publicidad privada ha vuelto a los medios”, mientras “la influencia de la pauta oficial es cada vez más alta” –casi dos mil millones de pesos-, con lo cual “la incidencia sobre las líneas editoriales es mucho mayor”.

Por la Unión de Consumidores Argentinos (UCA), que hace un año litiga en la Justicia por este tema, Fernando Blanco Muiño admitió que causan “vergüenza ajena” las explicaciones que brindaron las empresas y cadenas de supermercados cuando fueron intimadas a indicar los motivos de la “salida abrupta” de los medios.

En este sentido, advirtió que “todas las empresas violaron la Ley de Lealtad Comercial y de Defensa de la Competencia, porque actuaron cartelizadamente”, por lo que “deberían ser pasibles de multas”.

En representación del Grupo Clarín, Alberto Marina denunció que el impacto del cepo publicitario en 2013 fue de “varios cientos de millones de pesos”, sumado a que “la pauta oficial está absolutamente cortada” para el multimedios. “Si huebiésemos sido serviles al relato, esto no hubiese ocurrido. Clarín sobrevivió porque hay un grupo de empresas que lo sostienen”, reconoció.