Por Myrian Juárez. La diputada nacional plantea la necesidad de que los políticos decentes asuman el desafío de plasmar en la política el camino de los valores.
“Políticos”… “son todos iguales… todos hacen los mismo…”.
Traducido, son todos deshonestos, acomodaticios, fuertemente personalistas, falaces, inútiles en la administración de lo público y muy exitosos en los manejos privados,…etc
Estas afirmaciones son cada vez más “repetidas” por las personas en general… personas que transitan sus días aceptando resignadamente los acontecimientos… es la gente que igualmente asimila que “no importa si roba el político, lo importante es que haga”…
Esta somera síntesis descriptiva, que a los efectos reflexivos resulta suficiente, permite reconocer sin duda que estamos ante un doloroso y fantasmagórico escenario… que plantea a los políticos decentes…asumir el impostergable desafío de plasmar en la vida política el “camino de los valores” para alcanzar transformaciones sociales profunda”… es hora de repensar para “volver a las fuentes” que nos permitan reconstruir el tejido social y sus relaciones saludables… la violencia (en todas sus formas), la intolerancia, la corrupción y la impunidad son solos indicadores evidentes de una crisis profunda y agonizante en la que estamos inmersos…
La violencia solo conduce a más violencia (en todos los niveles y campos), entonces como diferenciarnos en las construcciones de espacios políticos si el método elegido es la descalificación permanente, el agravio personal o las generalizaciones irracionales de quienes se autoproclaman “dueño del saber”, “iluminados prematuros para su época” y “voceros de la verdad revelada”.
Los tiempos se agotan, las circunstancias nos superan y el pueblo exige… que los “parecidos” demuestren claramente que son “distintos” en palabra, obra, acción y omisión.
