La diputada nacional Alejandra Martínez consideró que resulta cuanto menos “curiosa” la afirmación vertida por la senadora Liliana Fellner, quien caracterizó la detención de Milagro Sala como un “avasallamiento”, a pesar de “no coincidir ni en las formas ni el modo de hacer política” con la dirigente de la Tupac Amaru.

En este sentido, dijo que la senadora pertenece al Frente para la Victoria, “espacio que promovió la creación de un verdadero Estado paralelo en la provincia y que subsidió y facilitó la construcción política de Sala”. Observó además, que la “falta de coincidencia” que alega Fellner “no se corresponde con la realidad que vivimos los jujeños estos últimos años”, y recordó que durante la gobernación de Eduardo Fellner, la Tupac Amaru “administró discrecionalmente” todos los recursos destinados a políticas sociales.

“No es dinero por el que se hayan rendido cuentas, sino todo lo contrario. Son fondos que Sala manejó con la discrecionalidad más absoluta. Empleó estos recursos para montar un sistema clientelar que transformó a los derechos de los cooperativistas en meras concesiones o favores de la organización, disciplinando a los beneficiarios de programas sociales con violencia y amenazas. Es ese el poder que Sala teme perder y allí se hallan las razones profundas del acampe. No puede entenderse este escenario sin la complicidad del espacio que integra Fellner”, afirmó.

Por otra parte, Martínez indicó que la senadora imputó al gobernador Gerardo Morales un presunto trato misógino para con Sala. “Sin embargo, no individualizó cuáles serían las circunstancias que, en su opinión, configurarían esta práctica discriminatoria, definida por la CEDAW como toda distinción, exclusión o restricción basada en el sexo (…) en las esferas política, económica, social, cultural y civil o en cualquier otra esfera”, apuntó y resaltó que “la discriminación por razones de género es una problemática muy seria; no podemos aceptar que Liliana Fellner la banalice de este modo, empleando insinuaciones y denuncias vacías para defender y justificar a Sala, con quien -según sus propios dichos- no coincidiría”.

En cuanto al cuestionamiento formulado por la senadora a la ampliación del Superior Tribunal “con militantes políticos de Morales y presión a autoridades electas”, Martínez advirtió que esta acusación “pone de manifiesto la verdadera intencionalidad política de Fellner, que sólo busca confundir a la opinión pública y debilitar al Gobierno provincial”. En este sentido, explicó que la selección de los nuevos vocales del Superior Tribunal se llevó a cabo siguiendo el procedimiento prescripto a tal efecto en el inciso 4 del artículo 155 de la Constitución Provincial. “No es este un dato que pueda escapar a la atención de Liliana Fellner, ya que de idéntico modo se eligen a los jueces de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y de otras provincias”, puntualizó, y dijo que “sorprende que el método le resulte extraño a la senadora, cuando su hermano designó en circunstancias en verdad cuestionables a jueces que antes fueron funcionarios suyos, o socios y funcionarios suyos, que fueron incluso fiscales de Estado de su gobierno”. “Otro de los jueces es hermano de quien fuera senador y dos veces vicegobernador de Eduardo Fellner”, completó.

Para la diputada de Cambia Jujuy, Fellner “no sólo no tiene memoria, sino que también está equivocada”, subrayando que “es indudable” que los magistrados de los tribunales inferiores deben seleccionarse por concurso, “necesidad que el Frente para la Victoria ignoró todos estos años y que nosotros hemos incorporado como objetivo de gestión, pero ello no obsta a la legitimidad de la ampliación efectuada de acuerdo a la Constitución de Jujuy y en forma concordante con el ordenamiento nacional, como así tampoco al modo de designación de los nuevos vocales que integran nuestro Superior Tribunal”.

Martínez amplió sus argumentos, señalando que “la capacidad e idoneidad de estos últimos está fuera de toda duda, y ello me consta. Sus pliegos fueron avalados también por el bloque del justicialismo y no recibieron ningún voto en contra” y destacó que “lo más importante es que los nuevos jueces no tienen nada que ver con la detención de Milagro Sala, que fue ordenada por el juez Raúl Gutiérrez, que tiene una larga trayectoria en la justicia provincial y que fue designado por Eduardo Fellner”.

“Lo mismo cabe decir de Gastón Mercau, que dispuso el desalojo de la zona ocupada por la Túpac Amaru, y de María del Rosario Hinojo, que prohibió la presencia de menores en el acampe. Ninguno de estos magistrados fue designado por Gerardo Morales, lo que excluye el supuesto 'avasallamiento' denunciado”, afirmó.

También consideró preciso recordar que “Sala no es una mera dirigente social, ya que fue diputada y electa al Parlasur, como así también cogobernó Jujuy junto a Eduardo Fellner durante la década kirchnerista, administrando enormes sumas de dinero”, en consecuencia resaltó que “tiene responsabilidades que exceden a aquellas que le corresponden al resto de los ciudadanos, sin embargo, faltó una y otra vez a esas responsabilidades, llegando a jactarse de haber volteado a ocho gobernadores en la década del 90, que es precisamente lo que pretendió hacer con el gobernador Morales”.