Gustavo Vera consideró “un mito” el hecho de que el papa Francisco haya recibido a más kirchneristas que macristas. “Es una cantidad pareja -dijo-, lo que pasa es que se le dio más relevancia a unos sobre otros”, además de aclarar que no es el vocero de la máxima autoridad del catolicismo: “Yo soy amigo del Papa”, precisó.

Además Vera negó que Francisco no mantenga dialogo con los funcionarios del Gobierno porque “hay llamados y cartas frecuentes e incluso el propio jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, lo vio en privado”, y consideró que el próximo encuentro entre Macri y el papa “no tendría por qué ser una relación gélida”.

Por otra parte, el legislador informó en declaraciones a Canal 26, los motivos por los cuales el sumo pontífice no visitará el país ya que “en 2016 aparecieron viajes imprevistos por situaciones de emergencia, como el conflicto de Armenia, Azerbaiyán, ahora Georgia, el viaje a República Centroafricana, a Suecia. Y en 2017 en Chile y la Argentina hay elecciones. Además, cuando sienta que viene a sumar y no a restar vendrá”.

Vera señaló que el jefe de la Iglesia Católica plantea en el Laudato Sí! que se debe “trabajar por la paz mundial y no por la guerra, usar energía renovable y no el exceso de energía basada en hidrocarburos, que dejan más dinero pero que está destruyendo el planeta”.

Entre otras de preocupaciones del Papa, el legislador indicó que “también plantea el hecho de recibir a los refugiados como hermanos, de hecho hay una cumbre con alcaldes, rectores de universidades para reconocer a los refugiados como hermanos”, y agregó que “también habla de la pelea contra las nuevas formas de esclavitud que son la trata, el narcotráfico, tráfico de niños, trabajo esclavo”.

A su vez remarcó que las banderas que levanta Francisco no tienen que ver con ideologías sino con “la defensa de la vida, la libertad, la dignidad y para cuidar la casa en común que es el planeta Tierra”, dejando así de lado al dinero y colocando a los hombres en el centro de la escena.

Vera explicó que Bergoglio “quiere que el Estado y el mercado trabajen por el bien común” y que además “siempre pensó que la cultura del encuentro no es un título, es una práctica que hizo toda su vida y considera que es clave para lograr una construcción de grandes consensos nacionales para proyectos a largo plazo, con independencia del gobierno de turno”.

El diputado señaló que hay un grupo que armó “una mesa contra el narcotráfico con el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo”, a la vez que al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, trabajan para que su cartera “empiece a meterse en el tema de la incautación de bienes de la mafia y su reutilización social”.

“También trabajamos con intendentes peronistas y de Cambiemos para armar mesas sectoriales para la lucha contra el narcotráfico. Nadie tomaba el toro por las astas, entonces con varios intendentes fuimos a la Corte Suprema y a Ricardo Lorezenti -presidente del Máximo Tribunal- se le ocurrió una muy buena idea que fue trabajar en red”, destaco Vera.

En ese sentido precisó que “en el circuito Merlo-Marcos Paz, estuvieron los dos intendentes, el fiscal federal, el fiscal provincial, el juez federal, el juez provincial, obispos, organizaciones de sociedad civil, el ministro de Seguridad provincial Ritondo, el ministro de Justicia nacional Garavano”.

Además agregó que “entre todos trabajamos en red y con criterio de bloque de legalidad. Por eso no hay excusas para no barrer con el narcotráfico en ese distrito”, y expresó su deseo de que esta acción se replique en otros distritos y “que haya un efecto contagio porque sino es imposible combatir a la mafia. La mafia actúa en red y el Estado debe articular con sociedades civiles”, finalizó.