Es un parque temático ubicado en la localidad alemana de Wolfsburg. Tiene siete pabellones y seis de ellos están dedicados a las empresas del Grupo Volkswagen.
Por Roberto Nemec
Se trata de una de las atracciones turísticas más visitadas de Alemania. Es una ciudad fascinante y excitante. Una ciudad increíble que escapa a la realidad. Así es Autostadt, la “Ciudad del Automóvil”.
Autostadt es un parque temático sin precedentes en el mundo, de edificios singulares y jardines surgidos sobre terrenos mineros. La construcción demandó tan sólo dos años, se realizó sobre 25 hectáreas y la inversión fue de 850 millones de marcos. Se inauguró el 1º de junio de 2000. Esta ciudad es un centro para la vivencia, una atracción para todas las edades y públicos de cualquier género.
El Autostadt lo forman siete pabellones. Seis están dedicados al Grupo Volkswagen (se entiende Volkswagen, Skoda, Audi, Seat, VW Vehículos Comerciales y Lamborghini) y el restante es el “Premium Clubhouse”, destinado a Bugatti. En el “KunderCenter”, una de las grandes atracciones del Autostadt, cualquier comprador de un Volkswagen en Alemania, Holanda o Austria puede recoger allí su vehículo personalmente pudiendo disfrutar con este servicio de una visita al parque y a la fábrica alemana.
El comprador puede realizar un recorrido a 48 metros de altura por las torres de acero y vidrio que rodean el parque y que contienen unos 400 vehículos cada una. Cuentan con un sistema automático de montacargas conectados a la fábrica a través de un túnel. Así, 15 minutos después de haber pasado todos los trámites administrativos, el cliente puede disponer ya de su vehículo.
Entre las atractivas alternativas del parque, está la de visitar el ZeitHaus Museum. Es un espacio donde se puede disfrutar de la historia del automóvil a través de los más de 100 coches expuestos.
Aquellas personas que vayan a quedarse más tiempo, encontrarán un ambiente exclusivo en el Hotel Ritz-Carltoin, Wolfsburg. Los proyectos de renombrados artistas internacionales ofrecen experiencias sorprendentes por su alta calidad estética.
Una ciudad fascinante y excitante. Una ciudad increíble que escapa a la realidad. No viven duendes, pero en esta ciudad de la fantasía todo es posible…
