A través de la Mesa de Acción Política del Congreso peronista, criticaron duramente a la gestión de Mauricio Macri, cuestionan haber concurrido al Fondo y reclaman transparencia en los actos de gobierno, a “propios y a extraños”.
La Mesa de Acción Política del Congreso Nacional del Partido Justicialista emitió un documento muy crítico con el Gobierno nacional, al que acusan de haber fracasado en su modelo económico y lo acusan de promover “el odio, la división y la persecución política”.
Por el contrario se manifiestan convencidos de que “unidos avanzaremos para lograr construir una nueva mayoría política y cambiar en serio y para bien la historia a partir de las elecciones en 2019”.
El pronunciamiento se difundió al cabo de la primera reunión de esa Mesa en la sede del PJ de la Capital, convocada por el presidente del Congreso, Gildo Insfrán y José Luis Gioja, a quien siguen considerando presidente del Consejo Nacional del PJ. Estuvieron presentes en este primer encuentro José Neder (Santiago del Estero), Rubén Marín (La Pampa), Beatriz Rojkes (Tucumán), Alberto Rodríguez Saá (San Luis), Estela Neder (Santiago del Estero), Gustavo Menéndez (Buenos Aires), Silvina Frana (Santa Fe), Fernando Espinoza (Buenos Aires), Cristina Álvarez Rodríguez (Buenos Aires), Eduardo De Pedro (Buenos Aires), Agustín Rossi (Santa Fe), Víctor Santa María (CABA) y Leonardo Nardini (Buenos Aires).
El crítico documento califica al de Mauricio Macri como un “modelo liberal”, a través del cual “las mayorías padecen las consecuencias del ajuste, la falta de trabajo, un alto endeudamiento externo e interno, y con índices de inflación descontrolados que no paran de crecer”.
“La política económica de Cambiemos ha fracasado -sostienen-, con el país sometido a un constante endeudamiento en miles de millones de dólares, bonos a más de cien años, fuga de capitales y pérdida de reservas del BCRA, se ha encontrando como solución a los problemas recurrir al Fondo Monetario Internacional, sin saber que la historia nos condena a padecer sus recetas de ajuste (condicionamientos a los gobiernos provinciales, suba de la edad jubilatoria, reducción de empleos y salarios, venta de acciones del FGS, reforma laboral impiadosa y tarifazos, entre otros)”.
Para los peronistas, “las familias argentinas no la están pasando bien; los trabajadores están preocupados por su salario y fundamentalmente por su empleo, los jubilados sufren, y día a día ven perder su poder adquisitivo a causa del aumento del costo de vida, donde ya no pueden acceder ni a los artículos de primera necesidad ni remedios”.
El documento habla de “despidos de a miles, tanto de empresas privadas como en el sector público”, y de jubilados que “sufren”, una clase media que “se deteriora” y una juventud que “pierde las esperanzas”. Según el PJ, “se ve sólo ajuste, y apenas a un reducido y poderoso sector económico-financiero al que le va mejor”.
Vinieron a “unir a todos los argentinos”, pero han promovido el odio, la división y la persecución política”, sostienen los peronistas, que se definen como “un movimiento plural, con vocación de gobierno y con diferencia de matices, abierto para recibir a todos aquellos que abracen y sientan con profunda vocación la Independencia Económica, la Justicia Social, la Soberanía Política y el respeto por los Derechos Humanos”.
“Para el peronismo la única grieta que existe es la desigualdad”, expresa el documento en el que exigen “transparencia en los actos de gobierno, a propios y a extraños. Y un combate permanente a cualquier acto de corrupción, flagelo que debemos rechazar y combatir en todos sus órdenes”.
Apuestan a “la expansión de la demanda, al consumo, a la protección del trabajo argentino, a los derechos de los trabajadores, a la inclusión, al desarrollo de las economías regionales, al de la industria y la producción agropecuaria”, y concluyen con la certeza de que “unidos avanzaremos para lograr construir una nueva mayoría política y cambiar en serio y para bien la historia a partir de las elecciones en 2019”.
