El Gobierno de la Ciudad presentó este lunes en la Legislatura el Presupuesto 2019, que cuenta con tres pilares fundamentales: “déficit cero, fuerte inversión social y bajas en los Ingresos Brutos”. La medida prevé aumentos de hasta un 38% en el ABL, aunque habrá beneficios para los contribuyentes que paguen por débito automático; también se buscará reducir las obras públicas, sin embargo se terminaran las que ya comenzaron.

El texto fue presentado ante la presa en una reunión encabezada por el ministro de Economía y Finanzas porteño, Martín Mura; la presidenta de la Comisión de Presupuesto, Paula Villalba; y el presidente del bloque Vamos Juntos, Agustín Forchieri.

En ese sentido, el funcionario explicó que “por segundo año consecutivo, la Ciudad plantea un cálculo de gastos y de recursos financieramente equilibrado sin déficit, estimado en 321.457 millones de pesos y con un Resultado Económico Primario superavitario por 71.500 millones de pesos” y destacó que áreas como educación, salud, desarrollo social, vivienda y cultura representan “casi el 51% del presupuesto total”.

Asimismo precisó que “se mantiene un alto nivel de inversión en gasto de capital, destinándose el 16,3% del presupuesto, es decir 52.255 millones de pesos, es decir, 4.200 millones más que lo destinado para el 2018” y remarcó que “este proyecto de ley respeta lo establecido en el Régimen Federal de Responsabilidad Fiscal firmado entre la Nación y las provincias, cumpliendo con los límites respecto al crecimiento del gasto corriente, como así también del endeudamiento, el cual se mantiene por debajo del 15% de los ingresos corrientes”.

Mura también aclaró que en el 2019, el cumplimiento del Consenso Fiscal y su adenda firmada recientemente “significarán para la CABA un impacto de aproximadamente 13.000 millones de pesos; más de la mitad lo explica el segundo año de baja del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, 7.000 millones”. El resto corresponde a los subsidios que deberá asumir la Ciudad 5.180 millones de pesos y a la eliminación del Fondo Federal de la Soja de 870 millones.

Tal y como lo había adelantado Villalba en parlamentario.com, el Presupuesto 2019 fue formulado con las mismas variables macroeconómicas proyectadas por el Gobierno nacional: una variación de la actividad económica de -0,5%, un tipo de cambio promedio de 40,1 pesos y un nivel de inflación de 23%.

Al respecto, el ministro señaló que “los ingresos y gastos corrientes proyectados para el ejercicio del próximo año muestran un Resultado Económico Primario de 71.500 millones de pesos que resulta 17.200millones mayor que el proyectado para el 2018”.

Aumentos en el ABL

En lo que respecta a los recursos totales para el año que viene, se estima que ascenderán a 321.457 millones. “Por recursos corrientes se calcula que ingresarán 315.000 millones, es decir 98% del total, mientras que por recursos de capital se proyecta percibir 6.480 millones, el restante 2%”, explicó Mura y destacó que “el total de recursos que se prevé recaudar en 2019 se incrementa con respecto a la proyección presupuestaria de 2018 en el orden de los 66.600 millones, lo que representa un crecimiento del 26%”.

Mientras que los ingresos tributarios se calculan en 295.000 millones; la recaudación por ingresos tributarios propios se estima en 218.000 millones, en tanto que los recursos provenientes de la Coparticipación Federal de Impuestos serán de 77.000 millones.

En lo que respecta al Impuesto Inmobiliario o ABL, se prevé un incremento promedio del 34%, estableciéndose un tope del 38%. Este tope promedio propuesto por el Ejecutivo a la Legislatura de la Ciudad se encuentra por debajo de la evolución de la inflación proyectada para el 2018 y del incremento de los valores de las propiedades.

Es así que el 65% de las partidas tendrá incrementos por debajo de los 150 pesos; el 20% sufrirá subas de hasta 450 pesos y el 5% abonará más de 450 con tope de 38%. Cabe señalar que el incremento durante este año fue del 20% en promedio, con un tope de 23,4%.

No obstante, para aliviar y dar mayores facilidades a los vecinos, la Ciudad hará un esfuerzo fiscal para que aquellos que no tienen deuda en este impuesto y adhieran su pago al débito automático, reciban la bonificación de la última cuota de 2019. Este beneficio se sumará al 10% del descuento por buen cumplimiento ya vigente.

Por otro lado, en lo relativo a la baja en los Ingresos Brutos el funcionario señaló que “la reducción gradual de estas alícuotas trae como consecuencia un esfuerzo fiscal importante por parte de la Ciudad, pero que tiene como objetivo final reducir la presión impositiva sobre la cadena productiva, fomentando así el crecimiento genuino de la economía”.

Durante el 2018, la Ciudad llevó adelante esta reducción sobre los sectores de la Construcción, la Industria Manufacturera, y el sector del Transporte y Comunicaciones, lo que representará un costo fiscal superior a los 4.300 millones, un 3,5% del presupuesto total. Para el próximo año se continuará con la implementación del esquema de reducciones establecido en el Consenso Fiscal, lo que significará un costo fiscal del orden de los 7.000 millones para la Ciudad.

Los gastos de la Ciudad

De esta manera, los gastos totales previstos para el ejercicio 2019 ascienden a 321.457 millones, en tanto que el gasto primario totaliza 295.642 millones, un 22,7% más que para el ejercicio 2018.

A su vez, en la composición de los gastos corrientes, el concepto de mayor incidencia es el correspondiente a las remuneraciones del personal, cuya previsión es de 142.475 millones, un 26,2% de incremento con respecto al año 2018. Cabe remarcar que ese importe contempla una negociación paritaria similar a la inflación proyectada para el año 2019, la cual se aplicará en forma escalonada.

En ese sentido, Mura destacó que “la Ciudad continúa con su política de priorizar la inversión en las áreas sociales, las cuales representan el 50,5% del presupuesto total”. Para el área de educación se destinarán 57.405 millones, lo que representa un crecimiento de 13.258 millones, es decir un 30% más con respecto al 2018; para salud se prevé una asignación crediticia de 49.300 millones, es decir un 30,4%; mientras que para promoción y acción social se destinarán 31.483 millones, un 34,5% más que para este año.

En materia de Plan de Seguridad Integral, se destinarán 46.500 millones, un 31,4% más que para el corriente año, es decir 11.100 millones más. Esta finalidad -que continúa siendo la principal preocupación de los vecinos de la Ciudad- representa el 14,5% del presupuesto total proyectado para el próximo ejercicio, con el objeto de seguir dotando a las fuerzas de seguridad del equipamiento, la indumentaria y la tecnología necesaria.

Por último, en lo que respecta a las inversiones en obra pública, el Gobierno porteño no iniciará nuevas obras pero finalizará las que ya se encuentran en ejecución. La inversión en infraestructura en la Ciudad para el 2019 asciende a 51.640 millones, en el orden del 16% del gasto total.

Entre las inversiones planeadas se encuentran una serie de mejoramientos a la Red de Subterráneos, edificación de nuevas comisarías y mantenimiento de las existentes, reurbanizaciones de barrios precarizados –Villa 31, Fraga, Villa 20, Rodrigo Bueno-, la construcción de la nueva sede del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, obras hidráulicas, entre otras cuestiones.