Durante la sesión de este jueves en la Cámara alta, el senador por La Pampa Juan Carlos Marino aprovechó la ocasión para pedir el pronto tratamiento de una iniciativa de su autoría, que propone crear el Foro de Acuerdo Político, Económico y Social de la República Argentina.

El proyecto tiene por finalidad consensuar políticas de Estado de largo plazo, que se mantengan más allá de las distintas administraciones nacionales, fortaleciendo así el sistema democrático. La idea es que estos puntos básicos troncales contribuyan a brindar previsibilidad y estabilidad, haciendo foco en aspectos como la economía, la paz social y la credibilidad en el sistema y las instituciones.

Este espacio, llamado también Foro para la Unión de los Argentinos, estará integrado por: un representante del Poder Ejecutivo Nacional, un representante por cada partido político con representación en ambas cámaras del Congreso de la Nación, uno del Poder Judicial de la Nación, representantes de las entidades gremiales del sector empleador y de las organizaciones sindicales, quienes ejercerán dicha función ad-honorem, es decir sin percibir remuneración alguna.

“La creación de este foro es mirarnos como dirigentes políticos y reconocer que, durante décadas hemos errado el camino. Cada gobierno supone ser dueño de la verdad, rechazando las medidas del anterior, para que quizás luego un tercero las vuelva a retomar. Eso no le hace bien a nadie, ni a un partido, ni a otro, ni mucho menos a los argentinos, verdaderos rehenes de esos vaivenes. Nuestro país alterna así, momentos de bonanza, seguidos de dolorosas crisis, y casi que ya aceptamos, resignados, que ese ciclo se repita una y otra vez. Lamentablemente, así no crece la Argentina, así no se reduce la pobreza, así no se crean industrias modernas que demanden trabajo argentino, ni se crean oportunidades para nuestros jóvenes.

Todos los países que superaron crisis profundas lo hicieron a partir de acuerdos mínimos que le permitieron establecer los puntos de partida para sobreponerse a sus problemas. Lo hicieron aprendiendo de los errores de su pasado y con la unión de clases dirigentes que se despojaron no solo de sus intereses sino también de prejuicios ideológicos. Aplicaron sentido común, resignando intereses sectoriales, partidarios y personales, en pos de un objetivo mayor.

“Debemos estar a la altura de las circunstancias y ser capaces de arribar a consensos. Soy consciente que es una tarea difícil, que requiere que demos lugar a un verdadero diálogo, reconociendo que el otro puede tener ideas valiosas y que podemos tener visiones erradas. Pero, así como entiendo que es un camino complicado, estoy convencido que es el único viable para que la Argentina tenga un futuro promisorio”, argumentó Marino.