La diputada Alejandra Lordén se refirió a las elecciones internas que se desarrollaran en la UCR bonaerense el próximo domingo por la conducción partidaria y sostuvo que ante “la vacancia de poder en el Gobierno, no hay espacio para egoísmos ni aventuras personalistas”.

“Estamos absolutamente convencidos que Juntos por el Cambio es, a la vez, condición necesaria para frenar el modelo de acumulación de poder del kirchnerismo, y también la única posibilidad cierta de avanzar hacia una Argentina federal, moderna y desarrollada”, expresó, en diálogo con parlamentario.com, la referente radical de la séptima sección electoral y una de las mujeres que forma parte de la conducción nacional de la UCR.

Lordén lleva seis años como diputada provincial. En el ordenamiento interno del partido ingresó a la legislatura como parte del armado que respondía a Ricardo Alfonsín, pero cuando el hoy embajador en España empezó a alejarse, Lordén prefirió la pelea dentro de lo que denominaba Cambiemos y no por fuera como parece que optó el hijo de Raúl Alfonsín.  

Recuerda que en 2015 “el partido venía muy debilitado, con poco territorio, pocos intendentes y representación legislativa”, pero admite que esa situación “cambió a partir de la conducción de Daniel Salvador y ahora, sobre esa base, vamos por más, con la conducción de Maxi Abad, vamos por el radicalismo del futuro”.

“Algunos de los que hoy hablan de fortalecer el radicalismo son los mismos que en el momento de mayor debilidad del partido hicieron alianzas con otras fuerzas y abandonaron al partido a su suerte”, relata Lordén en una clara referencia al adversario interno a vencer, el intendente de San Isidro Gustavo Posse. Empero, le da la bienvenida a “la competencia democrática”.

No obstante, aclara que “nosotros seguiremos trabajando, seguiremos los que nos quedamos en las buenas y en las malas, pretendiendo construir el radicalismo del futuro”.

Para la dirigente del interior provincial “la elección del radicalismo bonaerense es la primera gran definición de un año electoral intenso y complejo para todo el país”.

“Frente a los que quieren seguir administrando la decadencia, proponemos la consolidación de un gran frente transformador”, afirma la diputada que se constituyó en una voz respetada en temas sanitarios dentro de la legislatura provincial.

En el mismo sentido, para esta licenciada en Medicina y especialista en Obstetricia y Ginecología, que se desarrolló como concejala en su Saladillo natal, antes de ser diputada, “en este escenario, el principal garante de la unidad opositora para dejar atrás la decadencia, es este nuevo radicalismo. Esa es la pelea que estamos dando”.

Alfonsín nos enseñó que no hay democracia sin una búsqueda incesante y colectiva de la igualdad, y hoy vivimos en una sociedad profundamente desigual, atravesada por brechas que atentan contra cualquier posibilidad de desarrollo sustentable”.

Más allá del triunfo que descuenta, Lordén considera que el desafío mayor está afuera del partido, e incluso, de la alianza transitoria que hoy constituye la oposición. “Alfonsín nos enseñó que no hay democracia sin una búsqueda incesante y colectiva de la igualdad, y hoy vivimos en una sociedad profundamente desigual, atravesada por brechas que atentan contra cualquier posibilidad de desarrollo sustentable”, sostiene.

“Rebelarse contra esta actualidad es progresismo genuino, y esa ruta estamos recorriendo miles de mujeres y hombres plenamente conscientes de que la salud de la democracia está en juego, y de que si no reducimos las brechas que cruzan nuestras sociedades, cedemos espacio ante alternativas autoritarias y antisistema”, dijo.

Y concluye: “Ese es el norte de Adelante Buenos Aires y de todos los radicales del país que no se conforman con pertenecer a un partido con historia, sino que -con valentía y compromiso cívico- salen a jugar y a protagonizar el futuro”.