Se trata de una iniciativa de diputados porteños del oficialismo, mediante la cuál se buscará prohibir toda práctica médica, psicológica o de cualquier tipo, cuya finalidad sea la “conversión, aversión o reorientación sexual”.
Buscando garantizar los derechos humanos de las personas del colectivo LGBTIQ+, los legisladores de Vamos por Más (VxM), Unión Cívica Radical – Evolución (UCR-Ev), Unión por la Patria (UP) y Confianza Pública (CP) impulsaron en la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires un proyecto de ley para prohibir las terapias de conversión en el distrito capitalino.
El texto tiene por objeto "proteger y garantizar la dignidad y los derechos humanos de todas las personas en la Ciudad, prohibiendo toda práctica médica, psicológica o de cualquier tipo, cuya finalidad sea la conversión, aversión o reorientación sexual, así como todo procedimiento que estigmatice o diagnostique a una persona en base a su orientación sexual, identidad y/o expresión de género”.
Además, se buscará coordinar con los tres poderes del Estado y niveles de Gobierno y en las asociaciones de profesionales, universidades y organizaciones sin fines de lucro dedicadas a la temática, capacitaciones “para asegurar la formación de profesionales idóneos con conocimientos específicos en materia de salud integral para personas de cualquier orientación sexual y/o identidad de género”.
En los fundamentos de la iniciativa, los diputados aseveraron que estas terapias “son esfuerzos sistemáticos que buscan cambiar la orientación sexual, la identidad o la expresión de género de una persona, generalmente con el fin de hacerlas conformar con normas heterosexuales y cisgénero. Estas prácticas surgieron en el siglo XX bajo la falsa creencia de que la diversidad sexual era una condición patológica que necesitaba corrección”.
“Como señala un artículo de la agencia de noticias Presentes, a pesar de que en Argentina hay prohibiciones, hay quienes intentan burlar la ley mediante diagnósticos ambiguos. La investigación de Presentes revela que en Argentina todavía existen organizaciones que ofrecen ‘terapias de conversión’, y aunque la Ley de Salud Mental en Argentina prohíbe diagnósticos basados en la orientación sexual o identidad de género, no hay una prohibición explícita sobre las terapias de conversión, lo que permite que se sigan practicando de manera encubierta”, advirtieron.
Por lo que concluyeron planteando que “este proyecto puede desempeñar un papel crucial en la prevención del daño causado por estas prácticas, contribuyendo así a la protección integral de los derechos humanos”.
La iniciativa lleva las firmas de Emmanuel Ferrario, Facundo Del Gaiso, Hernán Reyes, Claudio Romero, Sergio Siciliano (VxM), Lucio Lapeña, Gustavo Mola, Guillermo Suárez, Manuela Thourte (UCR-Ev), María Sol Méndez (CP) y Claudia Neira (UP).