En una entrevista radial, el presidente Javier Milei criticó las resistencias legislativas y sindicales a sus reformas, mientras destacó el régimen industrial de Tierra del Fuego como un ejemplo de éxito liberal. Junto al legislador Agustín Coto, defendió su modelo de libertad en el marco de las elecciones nacionales y la convención constitucional provincial.
El presidente Javier Milei enfatizó este lunes las resistencias legislativas y opositoras a sus reformas, al tiempo que defendió el régimen industrial de la provincia de Tierra del Fuego como un modelo a replicar a nivel nacional, basado en la reducción de impuestos y la menor intervención estatal. Acompañado por el legislador Agustín Coto, presidente del bloque fueguino de La Libertad Avanza y candidato a senador nacional, abordó temas como las elecciones nacionales, la convención constitucional provincial y las tensiones con sindicatos y el “partido del Estado”.
En una entrevista con la radio fueguina Aire Libre FM, Milei subrayó que sus reformas representan un “cambio de 180 grados” en Argentina, lo que genera críticas inevitables del “statu quo”. “Evidentemente el statu quo se va a quejar. Es parte de la vida democrática”, afirmó, refiriéndose a opositores que, según él, defienden un modelo fallido responsable de la pobreza y la inflación pasada. En este contexto, criticó duramente al sindicalismo, al que describió como “muy politizado” y alineado con un partido político y el “partido del Estado”, responsable de décadas de subdesarrollo. Mencionó movilizaciones de la UOM (Unión Obrera Metalúrgica) como ejemplo de detractores, vinculándolos a resistencias contra sus políticas.
En el plano institucional y legislativo, el presidente destacó que mantiene relaciones con las provincias a través del ministro del Interior y el jefe de Gabinete, sin necesidad de diálogos directos. Admitió no haber hablado aún con el gobernador Gustavo Melella, pero aseguró que los “mecanismos institucionales” funcionan. Esto se enmarca en un contexto de tensiones opositoras, donde Milei posiciona sus reformas como un avance hacia la libertad, opuesto al “pasado” de dádivas y pobreza que atribuye a gobiernos anteriores, como el kirchnerismo.
Respecto al Congreso y las elecciones nacionales, Milei enmarcó la contienda en Tierra del Fuego como una “elección nacional” clave para consolidar sus reformas. “Se pone en juego abrazar las ideas de la libertad o retornar al pasado, a la pobreza”, dijo, urgiendo a elegir entre progreso económico o el retorno a la inflación y la dependencia estatal. Consultado sobre a quién deben rendir cuenta los diputados y senadores fueguinos, aclaró que representan a la provincia, pero en un marco nacional, debiendo alinearse con el modelo de libertad para evitar el “retorno a la pobreza”. No detalló rendiciones específicas, pero enfatizó la necesidad de continuar el “esfuerzo” de los argentinos en un “momento bisagra”.
Un punto clave fue la referencia al régimen industrial fueguino, tras visitar la planta de Newsan. Milei lo presentó como prueba de que “si vos le quitas la carga fiscal a un lugar, se expande”. “El problema no es la ventaja que tiene Tierra del Fuego. El problema es el continente, todo lo que paga además de impuestos”, argumentó, proponiéndolo como modelo para replicar: bajar impuestos y “correr al Estado del medio” para un mejor funcionamiento. Respetó “derechos adquiridos” y acuerdos existentes, alineándolo con su visión liberal.
El régimen de Tierra del Fuego, que vende los celulares más caros del mundo, goza de excelente salud.
Javier Gerardo y Karina Elizabeth Milei, los libertarios más locos del mundo. pic.twitter.com/2EXIxyRx5i— Juan Manuel López (@JuanmaLopezAR) September 29, 2025
Por su parte, el legislador Coto se refirió a la convención constitucional provincial, criticando la reforma impulsada por el gobernador como carente de fundamentos claros. “No sabemos para qué es. Se olvidaron la hoja de fundamentos”, dijo, describiéndola como un intento del “partido del Estado” de modificar una Constitución “de las más nuevas del país” (de 1991), que defiende explícitamente “la vida, la libertad y la propiedad”. Comparó negativamente con la reforma en Santa Fe, a la que llamó “un engendro”, y prometió defender los “valores de occidente” en las elecciones a convencionales del 26 de octubre. Sobre el puerto de Río Grande, Coto lo describió como un proyecto privado antiguo, excediendo competencias nacionales y dependiendo de la Dirección de Puertos provincial.