El diputado nacional y titular del bloque Unión Pro, Federico Pinedo, expresó su preocupación por la renuncia del titular del Banco Central de la República Argentina, puntualizando que “Fábrega es un hombre serio, es altamente preocupante su renuncia”, afirmó el diputado. Sin embargo, consideró que “en estos momentos que atraviesa el país, es importante generar calma y confianza para evitar que el desempleo y la inflación sigan aumentando”.

Por su parte, el diputado radical Julio Cobos dijo que “es una muy mala noticia la renuncia de Juan Carlos Fábrega. Se fue del gobierno uno de los pocos que intentó poner algo de racionalidad. Se fue el único dique de contención de mayores desmesuras y se queda el Ministro de Economía, responsable de la endeble situación económica actual”.

A su vez, el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Miguel Bazze, afirmó que “la renuncia de Fábrega al Banco Central es una demostración de la complicada situación económica del país y de la falta de capacidad del gobierno para resolverla”.

“El Gobierno insiste en negar los problemas y en victimizarse permanentemente en lugar de asumir su responsabilidad para poner limite al déficit, a la inflación y generar condiciones de previsibilidad para la inversión”, dijo el legislador y agregó que “en la medida en que el Poder Ejecutivo siga ignorando la realidad y se encierre en posiciones que han demostrado en estos últimos años ser absolutamente erróneas los argentinos vamos a padecer el agravamiento de la situación de la economía. El gobierno cada vez que analiza la marcha del país en este sentido no hace más que comparar la actual situación con la del 2003 sin asumir que en los últimos años, a partir de la intervención del INDEC, generó condiciones que dificultaron el crecimiento y el desarrollo de los argentinos”.

A su vez, el titular del radicalismo, el senador Ernesto Sanz, calificó a Fábrega como “uno de los últimos bastiones del sentido común”, por lo que lamentó su salida y consideró que el Gobierno “está desorientado y sin rumbo”. Sobre su reemplazante, advirtió que la UCR no acompañará la aprobación del pliego de Alejandro Vanoli, quien a su juicio “no tiene las características para ser un presidente del Banco Central”.

Para Fernando “Pino” Solanas también es “una mala noticia, porque demuestra que el equipo económico no tiene rumbo”.

Por su parte, el economista y diputado Martín Lousteau no se mostró tampoco sorprendido por la salida de Fábrega y la vinculó con el discurso presidencial del martes: “Cualquier funcionario que tenga dignidad, tras las declaraciones de Cristina deja el cargo”, dijo.

Para Alberto Asseff, a su vez, se trata de “otra mala noticia que genera más incertidumbre y desconfianza”. A su juicio, resulta “evidente que el Gobierno no sabe cómo manejar la crisis económica y los funcionarios más allegados se están haciendo eco de esto”.

“El Gobierno debe apelar a la objetividad, abandonar la retórica y arengas y comenzar a tomar medidas contundentes, entre otras, negociar con los holdouts y adoptar medidas urgentes contra la inflación”, finalizó el legislador alineado con Sergio Massa.

La senadora Silvia Elías de Pérez (UCR-Tucumán) redobló sus críticas al Gobierno ante la renuncia de Juan Carlos Fábrega y la designación de Alejandro Vanoli como sucesor de la entidad: “A Kicillof se le ha cumplido su sueño: ya puede manejar el Banco Central desde las sombras. El organismo ha perdido su autarquía para convertirse en un apéndice del Poder Ejecutivo Nacional”, dijo. Según la legisladora tucumana, la medida, lejos de dar certidumbre a los mercados, ahondará el descrédito internacional en el que se halla sumido el país.”El kirchnerismo administra una nación como si fuera una verdulería. No se puede improvisar sobre la marcha y menos en un contexto de extrema delicadeza económica”, determinó.

Según Elías de Pérez, “parece que desde la Casa Rosada están obstinados en escuchar los consejos de un funcionario que fracasó en la negociación con los fondos buitres”.