La diputada del Frente para la Victoria Mara Brawer rechazó fuertemente los dichos del periodista Jorge Lanata en el programa Periodismo para Todos, sobre el niño Casey Wander. “Aunque ya estamos acostumbrados al inusitado nivel de virulencia de los ataques de Jorge Lanata, hoy nos llama la atención el ejercicio de violencia contra un menor. Nos recuerda a cuando convocó a un escrache a hijos de jueces por la actuación de sus padres, a manos de sus compañeros, en una clara incitación al denominado ‘bullying’. Pero hoy el sujeto de sus diatribas es, directamente, un niño de 11 años que manifestó una opinión política”, expresó la diputada kirchnerista.

Brawer cuestionó el ataque y estigmatización a Casey, independientemente de la polémica acerca de si el niño fue demasiado expuesto en los medios. Para la diptuada, “Lanata agrede al chico por no estar de acuerdo con su pensamiento. Le falta el respeto a su opinión, le sugiere que en lugar de pensar en el país y tener opinión propia viaje a Disney o juegue con la Play Station. Lo desmerece y descalifica por tener 11 años, y se dirige a él como si fuera un adulto, con toda la dañina fuerza de su capacidad de fuego”.

“Lanata va contra el derecho de los niños -reflexionó la diputada- cuando se olvida del derecho a formar parte activa de la sociedad en que viven, el de ser escuchados, el derecho a la educación. Se olvida de que uno de los objetivos de la educación en Argentina es la formación ciudadana, en valores, en la memoria, la visión crítica sobre los procesos políticos y económicos de la historia argentina. Tanta bronca le da al conductor la opinión de este niño, que le dice que es el hijo del ministro de Propaganda de Hitler…”

Y concluyó: “Si el niño hubiera sido ‘descubierto’ sonando la cacerola en una marcha antikirchnerista, o si hubiera ofrecido opiniones brillantes en futbol o aritmética, para el conductor de Canal 13 estaría OK y seguramente lo amplificaría hasta el cansancio. En desmedro de todo esto, estoy segura que Lanata seguirá desgarrándose en futuros programas por la división de los argentinos, por la intolerancia del gobierno y sin ninguna duda, por el aumento de la violencia en las escuelas”.