El Ministerio de Economía buscará esta semana un acuerdo con los senadores del oficialismo y del radicalismo para destrabar la votación del proyecto de reformas al Impuesto a la Transferencia a los Combustibles (ITC), en su búsqueda por transformar en un valor porcentual el monto fijo que se tributa actualmente por cada litro de nafta.
La sanción de esta iniciativa es crucial para el Gobierno nacional dado que es el principal gravamen del paquete tributario acordado en la carta de intención firmada en enero último, con las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Si bien el Poder Ejecutivo ya consiguió la aprobación de las leyes de aplicación de ganancias sobre los reintegros a las exportaciones y reembolsos y de eliminación de los planes de competitividad, aún deben superar las trabas que existen para votar en el Senado el impuesto a los combustibles.
Por lo pronto, la totalidad del paquete no se sancionará por ahora, ya que los diputados postergaron por sus diferencias el debate del proyecto que establece una rebaja del 35 al 30 por ciento la alícuota del impuestos a las ganancias, en compensación por la derogación del ajuste por inflación.
Los senadores del justicialismo y del radicalismo acordaron el miércoles pasado demorar por quince días el tratamiento del proyecto de reformas al ITC, enojados por los diferentes datos que existen desde dos secretarias del ministerio de Economía sobre el impacto que tendrá esta medida en el precio de lo combustibles.
En este contexto, los informes que darán los secretarios de Hacienda, Jorge Sarghini, y de Energía, Enrique Devoto, en el plenario de la comisión de Presupuesto y Hacienda que se realizará mañana, serán clave para poder superar las críticas que existen en torno al proyecto votado en diputados.
El pronóstico más alentador del oficialismo es emitir dictamen el martes o miércoles y tratar ese despacho en la sesión del miércoles 26, aunque para ese día está prevista un agitado debate ya que se analizará si se expulsa o no a Luis Barrionuevo del Senado. El senador Oscar Lamberto -quien propuso postergar el debate durante la última sesión- advirtió que previo a cualquier análisis "los funcionarios del Ministerio de Economía deben unificar el discurso porque nos han llegados distintas evaluaciones sobre el impacto que tendrá esta nueva modalidad tributaria".
"Nosotros queremos tener datos precisos antes de dar dictamen sobre la influencia que tendrán las alícuotas que se aplicarán en el ITC en los bolsillos de los consumidores y cuáles son las previsiones del gobierno si como consecuencia de la guerra contra Irak aumenta en forma abrupta el precio del crudo", apuntó.
El proyecto votado en diputados transforma el monto fijo de 53 centavos que se cobra en el impuesto a las naftas en un índice porcentual del 64 por ciento y en el gasoil que es 15 centavos, en una tasa fija del 22 por ciento, mientras que en el Gas Natural Comprimido se lo fija en el 16 por ciento.
