El proyecto de Presupuesto 2009 para la provincia de Santa Fe sigue en veremos. Es que la norma naufragó hacia fines del año pasado en el Parlamento provincial y la provincia se maneja entonces con una extensión del Presupuesto 2008.

En efecto, el gobernador socialista de Santa Fe, Hermes Binner, sigue aguardando, pero no oculta la molestia que le causa que los legisladores provinciales no le hayan aprobado el proyecto de Presupuesto.

Es “un mal signo para la democracia”, advirtió el mandatario provincial, quien le apunta los cañones al Senado provincial. Sucede que ese Cuerpo está dominado por la oposición justicialista y allí naufragan las normas más controvertidas de la administración socialista.

Así sucedió por ejemplo en su momento con la Reforma Tributaria, que cayó en la Cámara alta tras ser aprobada en Diputados, donde el Frente Progresista Cívico y Social tiene mayoría.

Pero el problema es el Senado, y no lo ocultó Binner al advertir que “indudablemente que esa máquina de impedir que es el Senado no nos impide gobernar. Estamos gobernando”. En ese marco, advirtió que “sería un mal signo para la democracia que no se apruebe el presupuesto”.

Mientras tanto, mientras no le aprueben el proyecto, Binner dispuso la prórroga del presupuesto 2008 hasta tanto la Legislatura apruebe la nueva ley de leyes, que quedó trunca en el debate legislativo del año pasado.