La emisión de los dos dictámenes -uno por mayoría y otro por minoría- dejó al descubierto el enfrentamiento que mantiene una parte mayoritaria del bloque justicialista con el menemismo, que critica el juicio político abierto a los ministros de la Corte.

La votación terminó con un lapidario 17 a 5 en favor de apoyar el dictamen de Juicio Político, que rechazó el planteo de recusación presentado por el titular de la Corte, Julio Nazareno, y los jueces Eduardo Moliné O'Connor y Adolfo Vázquez. Así, la titular de la comisión, la menemista Alejandra Oviedo (PJ-La Rioja), se vio superada por la amplia mayoría de diputados miembros de Peticiones, que desoyeron su pedido de postergar hasta la semana próxima la definición del tema.

Sólo cinco votos sumó la postura de aceptar el pedido de los jueces de la Corte, en su totalidad todos hombres enrolados en el menemismo. Junto a Oviedo votaron los peronistas María Lelia Chaya (Salta), Adrián Menem (La Rioja) y los correntinos del Partido Nuevo Agustín Díaz Colodrero y Cecilia Lugo de González Cabañas.

Más allá del resultado de la votación, la reunión de la Comisión de Peticiones sirvió para desnudar las posiciones que existen en el bloque justicialista en torno al juicio político contra la Corte, uno de los temas que deberá resolver el oficialismo una vez que la comisión decida si impulsa la acusación de los magistrados ante el pleno de la Cámara baja.

Es que Oviedo mantuvo un duro enfrentamiento con el santacruceño y titular de la comisión de Juicio Político, Sergio Acevedo (PJ), en torno a si se debía dar curso a la recusación de los tres magistrados supremos.

El fuego lo abrió Acevedo, quien tras argumentar por qué la comisión a su cargo había rechazado la presentación, afirmó que "en esta comisión (por Peticiones) hay legisladores que defienden a la Corte". Oviedo tomó el guante y dijo que si discutía la recusación era porque "defendía la potestad de la comisión de tratar el tema y además porque es nuestra intención respetar las garantías consagradas en la Constitución Nacional".

A su turno, otro riojano, Adrián Menem, desnudó por completo su oposición al juicio político contra el máximo tribunal al afirmar que "si no hay causas sólidas para acusar a los jueces", él no está dispuesto "a participar de un linchamiento político".

Esto provocó una nueva reacción de Acevedo, quien volvió a denunciar que en la comisión "había diputados que defendían a la Corte", y la intervención del peronista Gerardo Conte Grand que pidió resolver de una vez por todas la cuestión.

Así se dio por tierra con la pretensión de Oviedo de postergar para el martes la emisión del dictamen y se fue a votación, imponiéndose por amplia mayoría el rechazo, en sintonía con la decisión de la comisión de Juicio Político a la recusación planteadas por los jueces de la Corte Suprema.

El rechazo de la petición realizada por los jueces Julio Nazareno, Guillermo López y Eduardo Moline O'Connor ya había tenido su primer capítulo cuando los diputados de la Comisión de Juicio Político desestimaron la recusación de una veintena de sus miembros. El argumento utilizado por Nazareno, López y Moliné O'Connor -vinculados a la denominada mayoría automática- es que no pueden integrar ese grupo de trabajo parlamentario aquellos diputados que no hayan suspendido sus matrículas de abogado y se basa en el artículo 90 del reglamento de la Cámara de Diputados.

Ahora tampoco tuvo lugar el reclamo de estos ministros de la Corte, pero en esta ocasión la decisión adoptada en una reunión pública agigantó las grietas entre los justicialistas que propician el juicio político al tribunal y los menemistas.

Por su parte, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Julio Nazareno, afirmó que el juicio político contra los integrantes del máximo Tribunal es "legal", aseguró que mientras se respete el "derecho de defensa, está todo bien", y le advirtió a la población que los miembros del cuerpo no inventaron el "corralito".

"El procedimiento del juicio político es legal, esta es la forma en que se debe remover al Tribunal y habrá que esperar el resultado de ese juicio. Y lo esperamos bien", afirmó Nazareno. El titular del máximo Tribunal indicó además, en declaraciones formuladas al salir de su domicilio, que "mientras se respeten los derechos de defensa" de los integrantes de la Corte en el juicio político que está analizando la Cámara de Diputados, "está todo bien".

Si bien advirtió que hubo "declaraciones de algunos integrantes de la comisión" acerca de la actuación de los miembros de la Corte, el titular del Tribunal indicó que esa situación no merece su "crítica".

Por último, el ministro de Justicia, Jorge Vanossi, afirmó que los integrantes de la Corte Suprema de Justicia deberán tener "oportunidad de una amplia defensa" en el marco del proceso de juicio político impulsado por el Congreso. Vanossi pidió a su vez a los magistrados ser prudentes al dictar fallos sobre temas de política económica y social, y advirtió sobre el peligro de caer en un "gobierno de los jueces".

El ministro aclaró que el Poder Ejecutivo "no tiene ninguna injerencia ni puede tenerla, ni debe tenerla" en el desarrollo del juicio político, y precisó que desde el gobierno "se está mirando y observando atentamente pero sin abrir la boca", pues "sería una indelicadeza, una desprolijidad, una invasión de un poder a otro si el Ejecutivo se metiera en esta etapa de la cuestión".