Diputados no ocultan su rechazo a integrarse a la Coalición Cívica como bloque uniforme en el Congreso nacional. Rechazan la designación de Adrián Pérez como titular del bloque en Diputados.
La prensa los ha nominado como “aristas disidentes”, aunque ellos rechazan ese término. Es que el razonamiento que hacen es que son ellos los que se han mantenido en el seno partidario, de ahí que no puedan ser considerados en discrepancia con quienes opinan y ordenan desde afuera. Y todos los caminos conducen a Elisa Carrió, sobre todo en materia de críticas.
El titular del bloque de diputados, Eduardo Macaluse, a quien la propia Carrió ha puesto fuera de ese cargo al anunciar cómo funcionará en el futuro lo que presentó como un interbloque opositor, se ha puesto en guardia. Fue bien concreto al sostener que “es difícil para Lilita aceptar las opiniones contrarias”, y en diversos reportajes sugirió en cambio que se dialogue para definir el rumbo de, en este caso, la Coalición Cívica.
No el ARI, para que quede claro.
En declaraciones radiales, el diputado aceptó que la acumulación de dirigentes de diversos signos “puede servir para acumular votos, pero la verdad no me interesa participar”.
El discurso uniforme de estos diputados aristas es mantenerse dentro del partido. Ninguno habla de dar portazos, sólo de no integrarse a la CC.
Macaluse cuestionó abiertamente el estilo de conducción de Elisa Carrió, e incluso la designación a dedo que hizo del supuesto nuevo titular de la bancada, Adrián Pérez.
El hasta hoy titular del bloque del ARI sostuvo que “en la medida en que nuestras diferencias se puedan procesar y el rumbo que se defina sea el que tuvimos cuando nos incorporamos al ARI, no tenemos problemas”.
En tren de cuestionar, Macaluse le apuntó a todo, incluso a las interpretaciones que Carrió hizo de la elección del 28, por cuanto dijo que “el robo de boletas no explica porqué no llegamos a la segunda vuelta como intentamos”.
El legislador dijo que “contribuiríamos mejor al debate si revisamos los errores cometidos y evitamos enfrentar a la sociedad en dos bandos irreconciliables. Cualquiera de las explicaciones que se dan no explica el resultado”.
“Cuando hacemos las cuentas y vemos que Cristina obtuvo el 45 por ciento de los votos y nosotros el 22,9, no alcanza con decir que nos robaron boletas”, disparó. Admitió, eso sí, que “Carrió ha hecho una elección que es muy digna con un esfuerzo enorme”, señaló, aunque aclaró que “pertenecer a un espacio y plantear el diálogo no significa romper ni tirar contra el liderazgo”.
“Discutir con Carrió es difícil porque no le gusta que le digan que no”, deslizó además el legislador del ARI.
