El proyecto recién se tratará en sesiones extraordinarias, cuando ya esté conformada la nueva Cámara. El oficialismo da por sentado que así sea, lo que obligará a emitir un nuevo despacho.
El oficialismo llegó a la Comisión de Presupuesto y Hacienda obligado como estaba por el emplazamiento votado a principios de octubre, pero con la intención de evitar que se firmara dictamen. La intención siempre fue postergar el tratamiento del proyecto de Presupuesto 2026 hasta que asuma la nueva Cámara. Si la oposición tenía número para emitir dictamen, ahí sí presentarían también uno propio y, en ese caso, era clave contar con la mayoría de firmas que permitiera que el despacho del oficialismo fuera de minoría.
Eso fue lo que terminó pasando, pero con lo justo, pues el dictamen de LLA y sus aliados contó con 20 firmas, el mismo número que el de Unión por la Patria. Así las cosas, el voto del presidente de la comisión Bertie Benegas Lynch terminó desnivelando en favor del oficialismo, conforme establece el artículo 112 del Reglamento de la Cámara baja, que dice: “Si hubiera dos dictámenes con igual número de firmas, el dictamen de la mayoría será el que lleva la firma del presidente de la comisión o de quien presida el pleno de las comisiones”.
¿Habían hecho un poroteo previo que les permitiera llegar confiados a la firma de los dictámenes? “No”, confesó una alta fuente legislativa del oficialismo ante la consulta de parlamentario.com. ¿En serio no sabían si llegaban con las firmas para tener el dictamen de mayoría? “No lo sabíamos; había dudas sobre lo que fueran a hacer los de Encuentro Federal”, admitió el legislador.
Sin embargo, la emisión del dictamen no anticipa un tratamiento inmediato del Presupuesto. Si bien el dictamen ya habilita a que la ley de leyes pueda ser tratada en cualquier momento, el oficialismo no teme que eso suceda la próxima semana. Ni la otra.
La Libertad Avanza se propone dilatar el tratamiento en el recinto hasta el período extraordinario, con la nueva conformación de las cámaras, lo cual implica que haya que emitir un nuevo dictamen, habida cuenta de que los despachos caen al renovarse las cámaras. Así las cosas, en caso de que el proyecto se trate en diciembre, como se propone el Gobierno, deberá constituirse la nueva Comisión de Presupuesto y Hacienda, que tendrá que emitir el dictamen correspondiente y luego si irá al recinto.
¿No temen que la próxima semana la oposición convoque a sesionar para tratarlo? “No, pero eso lo manejará Martín Menem”, repuso esta encumbrada fuente libertaria.
Sabe el oficialismo que después de la derrota electoral la oposición no hará un intento de sobreactuar la situación para forzar el tratamiento del Presupuesto ya, cuando lo más probable es que en ese caso no tengan quórum. Si un sector de la oposición buscara arrinconar en este tema al Gobierno, ahí sí actuarían seguramente los gobernadores para retirar el número de legisladores necesarios para que no haya sesión. De ahí que nadie piensa vaya a concretarse semejante sesión en el mes de noviembre.