Pocas horas después de que se diera inicio a un nuevo año escolar, los diputados del bloque Frente de Todos (FdT) presentaron en la Legislatura porteña un pedido de informes para que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de precisiones acerca del estado edilicio del Instituto Bernasconi, situado en el barrio de Parque Patricios, donde ayer se desprendió parte de la mampostería, durante el primer día de clases, e impactó sobre el padre de una alumna, el que debió ser trasladado a un hospital con heridas.

De esta manera, los legisladores pidieron que se informe sobre “las tareas realizadas para la contención de las personas afectadas por el evento”, así como “el parte médico y situación del padre que sufrió lesiones a raíz del desprendimiento, y que fuera asistido por el SAME y atendido en el hospital de agudos José María Penna”.

Además, demanda el envío a la Legislatura del “informe técnico del estado edilicio del área involucrada y del resto de la escuela” y pide conocer “la fecha de la última refacción realizada en relación a la estructura edilicia del Instituto Bernasconi”.

El hecho fue difundido por la Unión de Trabajadores de la Educación a través de un comunicado en el cual la entidad gremial aseguró que “una vez más la comunidad educativa sufre las consecuencias de la desinversión presupuestaria y de la desidia del mantenimiento en las escuelas de CABA”.

“Hace años que la comunidad del Bernasconi denuncia, en más de una oportunidad, el estado de abandono del edificio, no teniendo respuestas por parte del Gobierno porteño”, advirtieron y consideraron que “sería muy importante que los funcionarios y legisladores del Gobierno porteño, además de fotografiarse en actos y eventos del Instituto, como en el mismo día de hoy, trabajen para resolver la grave situación edilicia en la que se encuentra por el abandono de la gestión”.

En ese marco, la comunidad educativa redactó una nota a las autoridades porteñas en la cual exigieron “una solución urgente y permanente para los problemas edilicios de todo el Instituto, que afectan ostensiblemente a las molduras en general, al salón de actos y el natatorio, junto con el sistema de cañerías”.

En el pedido de informe, Alejandro Amor –uno de los impulsores del mismo- señaló que “es menester del Ejecutivo Local preservar en primer orden la salud de quienes habitan todos los espacios educativos de la Ciudad, y en segundo orden destinar los fondos necesarios para conservar, cuidar y poner en valor este tipo de espacios históricos. Más aun cuando se trata de instituciones dedicadas a la educación pública”.