De acuerdo al emplazamiento, los despachos se firmarán la próxima semana. Aliados de LLA rechazaron este martes el proyecto con media sanción. Ningún oficialista se refirió al tema, que pone en alerta al Gobierno.
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Durante un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Peticiones, Poderes y Reglamento de la Cámara de Diputados, que fueron emplazadas en la última sesión, miembros de la oposición ratificaron su posición a favor del proyecto con media sanción del Senado que prevé la reforma de la Ley de DNU (N°26.122), con el fin de limitar su uso abusivo por parte del presidente Javier Milei.
En el encuentro que se llevó a cabo este martes -la firma de los despachos será dentro de una semana- aliados de La Libertad Avanza rechazaron una modificación de este tipo ante un Gobierno con significativas minorías parlamentarias. Por su parte, ningún integrante del oficialismo se refirió al tema, cuestión que pone en alerta al Poder Ejecutivo y buscará frenar con ayuda de los gobernadores. En el Senado, la media sanción salió con más de dos tercios de los votos.
En el arranque de la discusión, la diputada de Unión por la Patria Mónica Litza recordó que el año pasado se alcanzó en la Cámara baja un dictamen que finalmente no llegó al recinto y, por eso, "es muy bueno que el Senado lo haya podido hacer; es una media sanción que va absolutamente en línea con lo que habíamos dictaminado".
Sobre la norma, la massista señaló que "lo que debía ser un excepción y un control del presidencialismo se ha convertido lamentablemente en la regla, sobre todo para este Gobierno". "Hay una desproporcionalidad entre el procedimiento de creación de leyes y los DNU", dijo e insistió que "debemos hacer todo lo posible para lograr la modificación de este instrumento mal usado por el Gobierno".
Para la legisladora de UP, esta reforma hará "fortalecer la división de poderes y el sistema democrático". "Tomar decisiones en forma unipersonal, dejando de lado lo colectivo, a corto o mediano plazo trae más complicaciones", advirtió.
Mónica Litza
A continuación, el diputado del Frente de Izquierda Christian Castillo manifestó: "Nosotros cuestionamos fuertemente esos atributos de monarca sin corona que tiene hoy el Poder Ejecutivo". Sobre la gestión de Milei, sostuvo que "ha hecho no uso y abuso de un DNU, sino una suerte de reforma constitucional de hecho" con el DNU 70/23 "pero que, sin embargo, raramente está en vigencia". Sobre ese mega decreto que inauguró la administración libertaria y fue rechazo únicamente por el Senado, aseveró que "tiene que ser tratado inmediatamente".
Presidenta de la Comisión de Peticiones, la macrista Silvia Lospennato celebró que "el sector político que impulsó esta ley admita que es inconstitucional, porque nuestro espacio político, el Pro, viene sosteniendo que es inconstitucional desde el primer día". "Cuando algunos están en el gobierno promueven normas que los favorecen y cuando están en la oposición la quieren cambiar", cuestionó.
Remarcó que a lo largo de estos años, desde el bloque amarillo se presentaron una docena de proyectos -uno incluso de Patricia Bullrich-, y que todos ellos "consideran que no puede haber sanción ficta". En el cierre de una extensa intervención, la legisladora que protagonizó una fuerte pelea con Cristian Ritondo dentro del recinto en la última sesión expresó: "Sin comprarme el republicanismo repentino de los que usaron y abusaron de esta ley durante tantos años; sin comprarme la hipocresía de los que dicen una cosa y cambian de opinión cuando nos les conviene la norma, yo quiero ser coherente con lo que mi partido a lo largo de 20 años ha sostenido en este Congreso".
Además de un cruce que tuvo con Litza, la diputada de Democracia para Siempre Carla Carrizo salió a responderle a Lospennato: "Me parece grave decir que la ley es inconstitucional, hay sí un debate constitucional, pero no hay un fallo de la Corte Suprema que diga que es inconstitucional". Y recordó que "pasaron seis gobiernos y todos los presidentes la utilizaron". "No se puede dejar instalado eso porque no es correcto legalmente", agregó.
A su turno, el jefe del bloque de la UCR, Rodrigo de Loredo, dijo que compartía "todos los argumentos críticos" hacia la ley y opinó que "es una insensatez que un decreto tenga una exigencia parlamentaria menor que una ley".
Según cifras aportadas por el cordobés, "(Carlos) Menem dictó aproximadamente 195 DNU, (Fernando) De la Rúa unos 70, (Eduardo) Duhalde unos 150, Néstor (Kirchner) fue el campeón con unos 250, Cristina (Fernández de Kirchner) a pesar de todos sus años (en la presidencia) fue una de las que menos lo usó, con 80; Mauricio Macri unos 70, Alberto Fernández unos 150 y Javier Milei lleva cerca de 70". Pero, al comparar las composiciones parlamentarias que cada gobierno tuvo, apuntó que el actual "no dispone de mayorías ni en la Cámara de Senadores ni de Diputados".
En su intervención, el radical aseguró: "Creo, desde el punto de vista jurídico, que aplicar un estándar de exigencia constitucional, o legal, o de rigurosidad legal, de una forma tan selectiva a un espacio político que carece de fortalezas políticas en Diputados y en Senadores, y que tiene una incoherencia, ya no con la trayectoria, sino con los contextos políticos e institucionales que tuvieron otros presidentes, es ante todo una postura antijurídica".
"En términos políticos, un accionar de estas características, con esta inequidad en su aplicación, es cuanto menos una acción que tiene por lo menos aspectos desestabilizadores, por un lado. Y por otro, paradójicamente, incluso a quienes son más opositores a este Gobierno, creo que sigue abonando al Gobierno la posibilidad de utilizar estos argumentos como excusa o chivo expiatorio para no hacerse cargo de los propios errores que va cometiendo", añadió.
Rodrigo de Loredo
Aliado de LLA, el catamarqueño de Liga del Interior Francisco Monti sostuvo que había habido durante la jornada “mucha argumentación de contexto político, y escasos planteos de orden constitucional”. Reconoció abrazar “una doctrina minoritaria” respecto de la constitucionalidad de los DNU y, en ese sentido, indicó que si bien los decretos de necesidad y urgencia no son leyes, tienen idénticos efectos que las leyes, “surten efectos similares a los de las leyes y mal puede interpretarse que el Congreso por inacción pueda producir efectos jurídicos derogatorios por el mero paso del tiempo”, en referencia a una de las modificaciones que se plantean.
Desde Democracia para Siempre, el diputado Fernando Carbajal afirmó que disentía con su compañera de bloque Carla Carrizo y sí coincidía con Lospennato en que la Ley 26.122 "es inconstitucional" porque "no hay dudas para el constitucionalismo que el procedimiento adoptado quiebra las bases y el espíritu" de la Constitución.
"El 80% o 90% de los DNU dictados por todos los presidentes no satisfacen el requisito de urgencia", resaltó y diferenció que sí estuvieron bien justificados los primeros dictados por Alberto Fernández al comienzo de la pandemia. No obstante, "todos los gobiernos han naufragado en la ilegalidad y el abuso", observó.
Nuevamente hablándole a Lospennato, el formoseño manifestó: "Yo tampoco me compro la vocación republicana de los compañeros del justicialismo, pero no importa, porque estoy convencido que estos límites son necesarios".
Desde el Pro, pero más precisamente bajo el ala de Patricia Bullrich, la diputada Silvana Giudici rechazó la reforma. "A los diputados que hablan de mantener la coherencia y alguno por ahí que hablaba del velo… hay que aclarar que aquí no hay que tener ninguna duda y hay que entender los contextos: si a un gobierno que tenía la suma del poder público se le otorgó la ley que reglamenta los DNU (por los Kirchner), no se modificó en su momento ni la aprobación ficta, ni las facultades delegadas, siguieron legislando con superpoderes y emergencia permanente, llega un gobierno distinto, sin estructura política, casi sin partido político, sostenido por un conjunto de diputados del presidente que hoy gobierna, y algunos que tenemos una alianza electoral en los principales distritos, y entonces sí se acuerdan de derogar los DNU, las facultades delegadas, quiero decirles que el rol del Congreso está perfectamente ejecutado en este período”.
Sobre eso, apuntó que “somos parte de una cámara que ya ha rechazado 5 DNU de este Gobierno y ha ratificado una insistencia, derogando y rechazando dos vetos del presidente en ejercicio”. “Vos no podes analizar una modificación en un contexto donde la mayoría abrumadora está haciendo cumplir el rol original de este Congreso, que es el de control de los actos de gobierno. ¿Dónde está la urgencia de modificar la Ley de DNU que se negó tantas veces? Desde el Pro sostenemos que para esto no nos cuenten”, sentenció.
En el cierre, el jefe de UP, Germán Martínez, mencionó a los senadores de la UCR y el Pro que votaron a favor del proyecto. "¿Todos estos son golpistas? Porque todos votaron esta media sanción. O no se comunican entre ustedes, o se arrepienten, o juegan a dos puntas...en el Senado de la Nación avanzan y acá quieren demorar", remarcó. Y pidió "no buscar excusas para no avanzar". "Cuando se analiza la historia nunca hubo un DNU como el DNU 70 y tantas materias afectadas por un decreto de necesidad y urgencia como por ese", completó.
La media sanción del Senado propone que los DNU deban versar sobre una única materia y que podrán ser tratados de inmediato aún en receso parlamentario. Uno de los cambios centrales es que serán aprobados con el voto de ambas cámaras, mientras que el rechazo de una bastará para que queden sin efecto (hoy es al revés). También podrán caer si no se tratan dentro de un plazo de 90 días.