En una extensa entrevista con Luis Majul, el presidente intentó cerrar el capítulo Espert con una mezcla de respaldo personal y discurso de confrontación. Negó haberlo echado, habló de “chimentos de peluquería” para desestimar los escándalos, y anunció cambios en el Gabinete.
El presidente Javier Milei echó de la escena política al candidato a diputado José Luis Espert con la pretensión de sacarlo del ojo de la tormenta y evitar otra paliza electoral, a tres semanas de la elección legislativa, pero no se salió del libreto: lo defendió a capa y espada, dijo que no duda de su "honorabilidad" y culpó de todo al kirchnerismo, a la vez que ratificó el rumbo económico.
El jefe de Estado habló una hora y media en el programa La Cornisa, de Luis Majul, uno de sus periodistas preferidos. Estaba tranquilo, calmo, pero se observó un cierto nerviosismo y dudas cuando habló del escándalo Espert, a quien lo apoda "El Profe".
Más de una vez le pidió a Majul que le dejara concluir sus reflexiones. "Voy a tratar de hacer lo que pueda”, respondió ante el pedido de que responda en forma breve.
En la entrevista, Milei, tras marchas y contramarchas -el viernes Espert estaba ya afuera-, volvió a su muletilla preferida para defender los affaires: “Son chimentos de peluquería, ojo con eso”.
Y aplicó esa fórmula para los escándalos de la criptomoneda $LIBRA, las presuntas coimas en la ANDIS en conexión con Karina Milei y el que vincula a Espert con el supuesto narco Fred Machado: "Chimentos de peluquería".
Al único integrante de La Libertad Avanza que criticó fue al extitular de la ANDIS, Diego Spagnuolo, a quien explicó que lo "apartó" porque en audios hizo denuncias que nunca las llevó a la justicia.
"Lo tuve que apartar a Spagnuolo. Se la pasaba hablando mal de mis ministros", sostuvo el jefe de Estado.
Al hablar del "kirchnerismo", definió que "son como los chanchos, están llenos de barro" y contrastó: "Nosotros somos gente honesta”. Y los desafió: "Vengan kukas. Discutan propuestas".
Seguidamente, dio por terminado el capítulo del narco escándalo: "Lo importante ahora es ir para adelante. Ahora vamos para adelante", como si no supiese que la polémica se va a trasladar ahora al Congreso, donde opositores querrán sacar a Espert de la Presidencia de la Comisión de Hacienda y hasta pedirán su expulsión de la Cámara.
Sobre la titularidad de la comisión parlamentaria, bajó línea y propuso al diputado Berti Benegas Lynch (LLA).
"Yo no lo eché ni lo hubiera echado. Soy distinto a la casta política. Se estaba contaminando el debate", insistió acerca del apartamiento de Espert como candidato.
Más adelante, Milei adelantó cambios en el Gabinete nacional: "Voy a rearmar el equipo en función de las reformas que voy a hacer. Hay áreas que no están funcionando como tendrían que funcionar", frase que recordó a la crítica de la entonces vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner al presidente Alberto Fernández: "Hay funcionarios que no funcionan".
Acerca de la marcha del Gobierno, afirmó que "el rumbo es el correcto" y remarcó que ahora hay un "30% de inflación anual", aunque aclaró que "la tarea no está completa".
Llamó la atención que defendiera a pie juntillas el desarme de las letras del Estado LEFI, medida muy criticada por economistas de diversas orientaciones, a los que el Presidente denomina econochantas.
Las LEFI son los tíulos de deuda a corto plazo emitidos por el Tesoro Nacional para absorber pesos excedentes en el sistema bancario y controlar la liquidez y la inflación, pero esa medida disparó la volatilidad del dólar y junto a otros errores políticos y económicos originó el peligro de corrida cambiaria el mes pasado.
Además, el jefe de Estado negó que esté rota la relación entre Karina Milei y Santiago Caputo, su asesor estrella: "Es excelente la relación. No existe ningún problema. Karina es una persona de mi máxima confianza y Santiago es de mi máxima y absoluta confianza", exclamó.
Acerca de la elección legislativa del 26 de octubre frente a todos estos aspectos negativos, Milei abrió el paraguas: "Hay que mirar cómo queda la composición de las cámaras. Yo tengo confianza que vamos a ganar".
Por último, reiteró lo afirmado en la semana: "Hay una desaceleración de la actividad económica" y se la adjudicó a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y al "torpedeo del Congreso”.