Se trata de un proyecto que evitará que los exportadores registren sus ventas antes de adquirir el producto y especulen con el pago de las retenciones.
La Cámara alta aprobó con modificaciones la ley de Granos, que devolvió a Diputados luego de modificar el artículo uno para que la fecha a computar para que opere el impuesto no sea el de la declaración de venta sino el de la fecha en que cambian los derechos de exportación.
El objetivo es evitar maniobras para eludir el pago de retenciones mediante esos registros anticipados.
Cuando se convierta en ley, las cerealeras pagarían la diferencia de derechos entre el registro y el embarque, que sumaría al fisco uno 450 millones de dólares.
Se trata de aquellas empresas que anotaron en octubre exportaciones por casi 19 millones de toneladas de soja, que recién se cosecharán en mayo, para eludir el aumento del 27,5 al 35 por ciento que imprimió el Estado sobre los granos.
Diputados trataría el proyecto de ley, caratulado como “Acreditación de la fecha de Adquisición de Productos Agropecuarios por parte de Exportadores”, en la próxima sesión.
El proyecto modifica la ley 21.453, de 1976, que establece el régimen de declaraciones juradas que rige al mercado de granos y permite a los exportadores registrar sus ventas incluso antes de adquirir el producto.
