A JxC se le complica renovar todo lo que arriesga en CABA
Si se repitieran los resultados de las PASO, la lista encabezada por María Eugenia Vidal estaría alcanzando 7 bancas y son 10 las que expone.

Es inobjetable que en el marco de la campaña de Juntos por el Cambio en Ciudad de Buenos Aires su primer candidata sugiera al electorado que deben tener más votos el 14 de noviembre para que pueda llegar al Congreso la científica Sandra Pitta, novena de esa lista. María Eugenia Vidal ha dicho que repitiendo los resultados de las PASO el espacio ya logra sumar 8 diputados, por eso van por el noveno -en este caso, la novena-.
Otros más entusiastas exageran, como un comunicador que el viernes por la noche sugería en un canal de noticias que con el 50% que estarían anticipando algunas encuestas, no solo estaría ingresando Sandra Pitta, sino que Carlos Heller estaría quedando fuera del Congreso.
La realidad es que si el resultado de las PASO fuera definitivo, Juntos por el Cambio estaría llevando al Congreso por CABA 7 diputados, 3 menos de los que pone en juego.
El Frente de Todos lograría 3, La Libertad Avanza 2 y la izquierda consagraría a Myriam Bregman. Es una cuestión matemática que el voluntarismo no puede alterar: se eligen 13 diputados, no 14.
En Juntos por el Cambio siempre supieron que lograr la elección de todos los diputados que expone en el distrito en el que gobierna el Pro era una misión prácticamente imposible. El número máximo de diputados que ha logrado consagrar en una buena elección es 8. La cifra elevada que debe renovar en esta elección se debe a que en 2017 Cambiemos sumó 8 diputados en ese distrito y Evolución, el espacio conducido por Martín Lousteau, 2: el propio Lousteau y Carla Carrizo (cuando el primero pasó al Senado, su banca quedó en manos de Alvaro de Lamadrid).
Para alcanzar las 8 bancas, la lista que entonces se denominó Vamos Juntos cosechó 50,98% de los votos, mientras que Evolución sumó sus dos diputados con el 12,30%.
El kirchnerismo se presentó ese año como Unidad Porteña y el 21,74% que reunió esa vez le alcanzó para sumar los 3 diputados que este año debe renovar.
El 5,79% que reunió no le alcanzó al Frente de Izquierda y de los Trabajadores para alcanzar una banca.
Ese es el dato que hay que tener en cuenta para entender el reparto de bancas que estaría dándose según las PASO. Pasando los 20 puntos, el Frente de Todos tendrá un mínimo de 3 bancas, y superando el 12% la tercera fuerza ya se asegurará un par. Y sumar más de 6 puntos casi que garantiza ya una banca.
Juntos por el Cambio sumó el 12 de septiembre un 48,10% (menos que en 2017); el Frente de Todos 24,66% (más que hace 4 años); y el espacio de Javier Milei 13,66% (más que Evolución en 2017).
La diferencia está en que el Frente de Izquierda y de Trabajadores superó los 6 puntos (6,23%).
Convengamos que en 2019 la izquierda también superó los 6 puntos (6,13%), pero esa vez no tuvo premio. Todo se lo repartieron Juntos por el Cambio y el Frente de Todos, que sumaron 53,02% y 32,05% respectivamente. Había en juego entonces 12 bancas y 8 fueron para JxC y 4 para el FdT. En caso de haber habido una decimotercer banca en juego, como este año, hubiera sido para el FIT.
Hay un dato aun más inquietante para Juntos por el Cambio, que es el resultado de 2015, año en el que se repartían 12 bancas en el distrito porteño. Esa vez Cambiemos sumó 45,80 puntos, lo que le valieron solo 6 bancas. El Frente para la Victoria tuvo 22,37%, transformados en 3 bancas.
La tercera fuerza de entonces fue Unidos por una Nueva Alternativa (UNA), que alcanzó un porcentaje similar al de Milei en septiembre, 14,33%, o sea 2 diputados. Pero hubo una cuarta fuerza, Progresistas, que hizo un buen número que le permitió alcanzar la banca restante: 8,53%.
De tal manera, Juntos por el Cambio debe asegurarse este año redondear al menos el 50%, como siempre ambicionaron desde esa fuerza, si es que quiere retener al menos el número histórico accesible. Para soñar con retener la decena de bancas que expone, debería acercarse mucho a los 60 puntos y que se vacíen de votos terceras y cuartas fuerzas. En la medida que la izquierda retenga los votos de las PASO y se supere un poco, esa última banca no irá para el que más votos tenga, sino para sentar a Bregman en el Congreso. Y lo mismo corre para la fuerza de Milei: en la medida que crezca y Leandro Santoro no baje drásticamente, la tercer banca de esa fuerza será a expensas de la que encabeza la exgobernadora bonaerense.
Fuerza | Porcentaje | Bancas |
PASO 2021 | 13 | |
Juntos por el Cambio | 48,10 % | 7 |
Frente de Todos | 24,66 % | 3 |
La Libertad Avanza | 13,66 % | 2 |
FIT | 6,23 % | 1 |
XXX | ||
2019 | 12 | |
Juntos por el Cambio | 53,02 % | 8 |
Frente de Todos | 32,05 % | 4 |
FIT | 6,13 % | – |
XXXX | ||
2017 | 13 | |
Vamos Juntos | 50,98 % | 8 |
Unidad Ciudadana | 21,74 % | 3 |
Evolución | 12,30 % | 2 |
FIT | 5,79 % | – |
XXXX | ||
2015 | 12 | |
Cambiemos | 45,80 % | 6 |
Frente para la Victoria | 22,37 % | 3 |
UNA | 14,33 % | 2 |
Progresistas | 8,53 % | 1 |